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El Buki enamora y agradece a su publico

Agencia Reforma | 24/03/2024 | 09:55

Eternamente agradecido" se mostró Marco Antonio Solís en su regreso a Monterrey, durante el concierto que ofreció ante un público ansioso y emocionado que lo ovacionó de principio a fin.

A las 21:40 horas, una serie de videos aparecieron en una gran pantalla con parte de la trayectoria en la música del cantante, para aparecer El Buki en el escenario montado en el Estadio de los Borregos vestido de negro con un saco rojo.

"Se Va Muriendo Mi Alma" y "Y Ahora Te Vas, fueron los temas que escogió para abrir su Eternamente Agradecido Tour ante 12 mil personas que llenaron el lugar, de acuerdo a los organizadores.

"Buenas noches, hermanitos de Monterrey. Estamos con mucha gratitud, de corazón, por todo su cariño y el amor que nos han dado", expresó el cantante.

"Pásenla bien y un abrazo especial a mis cincuentones.

Pueden cantar y llorar, hay que expresarnos, de eso se trata esta noche", agregó el cantautor originario de Michoacán.

Su público respondió de inmediato cantando al unísono cada estrofa de sus hits.

Cuatro bailarinas acompañaron al intérprete en el escenario en algunos temas como en "Bajo los Ojos de Dios" y "El Perdedor".

"Hay una canción que me piden mucho, parece nueva pero tiene muchos años, ojalá que les guste", expresó previo a interpretar "Invéntame", una de las más aplaudidas de la velada.

Aunque la temperatura en el lugar era fresca, la voz de quién es considerado uno de los ídolos de la música mexicana, se encargó de poner un cálido ambiente a través de cada melodía.

"No hay nada como estar enamorados hermanitos, pero no necesariamente una relación que empieza tiene que funcionar así de fácil, donde no hay amor no hay nada que hacer", expresó antes de cantar "O Me Voy o Te Vas".

Sus éxitos "Acepto Mi Derrota", Tú Cárcel", "A Dónde Vamos a Parar" y "Cómo Tú Mujer", se unieron a la velada.

"Es uno de los grandes ídolos que quedan en México", afirmó Julieta Cárdenas, fanática que celebró su cumpleaños en el concierto tras recibir un boleto de regalo por parte su hijo, Daniel González, quien también la acompañó al concierto.

Diamantina Pérez y su hija Stephanie Loera cantaban con una fotografía de su padre, Reynol Loera, quien murió hace cuatro años y cuyo fanatismo por El Buki, las motivó a comprar los boletos para el concierto.

"Él lo podía escuchar todos los días, cantaba y decía que él era Marco Rey", compartió Diamantina, con una enorme sonrisa en el rostro.

Como si de un joven se tratara, Solís de 64 años bailó, cantó, tocó en todas las canciones que interpretó en una noche inolvidable para sus fans regios.