Todos los clósets del mundo necesitan tener un espacio considerable para los colores neutros, que son esos colores que se consideran atemporales, clásicos y fáciles de combinar con muchos otros tonos.
Los colores neutros en realidad son la base sobre la que puedes construir todo tipo de looks distintos y sacarle mucho más provecho a la ropa que tienes, además de que pueden ser la clave para verte joven, atractivo, más elegante y sofisticado, o para que tu estilo casual se vea más elevado y bien arreglado.
Hay algunos colores neutros que pueden parecer aburridos, como el beige o el gris, pero en realidad no lo son, simplemente hay que aprender a sacarles provecho y usarlos como lo que son, esos bloques que se convierten en la mejor plataforma para jugar con el estilo y probar diferentes looks y opciones.
La ventaja es que nunca van a pasar de moda, así que tener unas cuantas piezas con esos tonos (blanco, gris, azul marino, beige, negro y tal vez también el verde militar) significa que no tienes que estar cambiando tu ropa cada temporada y que tu ropa favorita va a durar más.
Vale la pena tener una buena variedad de colores, pero entre los llamativos, los que están en tendencia y los extravagantes siempre deben estar los neutros.
¿Cómo sacarle provecho a los colores neutros?
El toque de color
Vestir con colores neutros es fácil, simple y rápido, además de que funciona muy bien y se puede usar para construir estilos monocromáticos perfectos, pero también es buena idea sumar un poco de color para que el look completo se va más interesante o incluso moderno.
¿Cómo se hace? Lo primero que hay que hacer es construir tu look por medio de puntos básicos y colores claves, por ejemplo, con unos pantalones negros, una tshirt blanca y una chaqueta beige, y después sumas los elementos de color, que pueden ser unos tenis coloridos, un accesorio, una gorra o un pañuelo alrededor del cuello.
Lo importante es que el color que uses para resaltar combine bien con el resto de tu look y ayude a complementarlo.
La regla de los tres colores
Esta regla de los 3 colores no es nueva, ha existido por mucho, mucho tiempo e incluso se dice que es una de las mejores opciones para conseguir un estilo preppy o una estética Old Money, que es clásica e inteligente.
La regla consiste en que, a la hora de vestir, debes construir tu outfit limitándose a usar solo 3 colores, por ejemplo, blanco negro y beige, azul blanco y gris, o azul blanco y verde militar. Esto ayuda a mantener la simplicidad, pero también a que el look completo se vea menos plano y más sofisticado, sin caer en excesos de color.
Texturas y detalles
Las texturas y los detalles pueden ayudar a que tu look monocromático o muy neutro se vea más actualizado, pensado y poderoso.
Por ejemplo, cuando usas un look All Black, no te quieres ver como una mancha en color negro, así que puedes elegir piezas con diferentes texturas para crear un contraste y tener mayor profundidad, o puedes irte por los detales, como un estampado pequeño, algunos accesorios en color o unos tenis llamativos, lo que también permite que el uniforme que decides usar todos los días se vea más variado e interesante.
Además, jugar con texturas y materiales también puede ayudar a que tu look tenga una buena transición del verano al otoño o invierno, donde las texturas y materiales más gruesos se pueden ir cambiando por los más ligeros dependiendo del clima o hasta las tendencias de la temporada.