Un nuevo anteproyecto de reglamento del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) busca que, para poder pasar del Nivel 1 al 3 dentro de esta estructura, los científicos tengan que invertir al menos 20 años.
Esta nueva disposición impediría que los académicos puedan pasar de un nivel a otro sin haber estado al menos dos periodos, de cinco años cada uno, en cada etapa. Incluso demostrando los méritos suficientes para hacerlo.
Publicado este jueves en el portal de la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer), el anteproyecto ya ha generado críticas porque esta nueva medida, señalan investigadores, no incentiva el trabajo científico.
"No me hace muy feliz que se tenga que pasar N1 veces por un nivel para acceder al siguiente... ¿Cuál es el incentivo para gente que vamos cumpliendo los requisitos en los tiempos antes establecidos?", opinó en Twitter, por ejemplo, el biólogo computacional Guillermo de Anda-Jáuregui, investigador del Instituto Nacional de Medicina Genómica.
Como justificación de este cambio, el Conacyt cita la intención de "afianzar" los niveles del sistema, pero sin ahondar cómo es que mantener a los científicos 10 años en el Nivel 1 y 2 logra este objetivo.
"El afianzamiento de los tres niveles del SNI, promoviendo la permanencia de los y las investigadores por al menos dos periodos en cada uno de dichos niveles. A fin de reforzar este objetivo, los periodos de las distinciones serán ahora de 5 años", expone ante la Conamer.
En el reglamento todavía vigente, un investigador que, de un periodo al otro, cumpliera con todos los requisitos, podía pasar del Nivel 1 al 2 en tres años, y del 2 al 3 en cuatro años más.
La nueva disposición, además, implica que los investigadores tendrían que permanecer al menos 10 años percibiendo el monto del estímulo de los primeros dos niveles, sin posibilidad de acrecentarlo por sus méritos académicos.
Es decir, un investigador de Nivel 1, que percibe mensualmente seis veces el valor de la UMA (17 mil 550 pesos) ahora tendría que permanecer con esta cantidad durante una década, cuando antes, si cumplía con los requisitos necesarios, en tres años podía llegar al 2 con un estímulo de ocho veces el valor de la UMA (23 mil 400 pesos).
El anteproyecto, por otro lado, mantiene la medida, ampliamente juzgada como discriminatoria por la comunidad científica, de que sólo los investigadores adscritos a instituciones públicas puedan ser acreedores a recibir un estímulo económico.
Este nuevo reglamento desatiende, además, las sentencias de cuatro jueces federales que ya declararon inconstitucional excluir a los investigadores de universidades privadas de la posibilidad de recibir apoyos económicos como parte del SNI.
La suspensión de estímulos para el sector privado afectó a más de mil 600 investigadores, de alrededor de 100 instituciones, que han tenido que recurrir a múltiples amparos desde inicios de este año.
El nuevo reglamento del SNI está pendiente de su aprobación, para luego ser publicado en el Diario Oficial de la Federación y pueda entrar en vigor.
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