En la calle Miguel Hidalgo marcada con el número 706 y con intersección con la avenida Reforma se encuentra el famoso "Charco Verde", inmueble que ahora alberga oficinas de la Dirección General de Seguridad Pública Municipal (DGSPM), edificio que fue del Ingeniero Luis Barragán, y originalmente era adornado con dos torreones en las dos esquinas frontales, su arquitectura estuvo influenciada por la de la Penitenciaría del Estado que se conoce al día de hoy como el Centro de las Artes.
¿Por qué "Charco Verde"?
Desde su construcción en 1905 este edificio fue destinado cuartel de la Gendarmería, y posteriormente como cárcel, llamado "Ciénega" o "Charco Verde", este último nombre derivó luego de que en la zona de su ubicación, cuando llovía de manera copiosa, descendían las aguas por las vertientes de la sierra de San Miguelito hasta los cauces de los ríos Santiago y Españita, sin embargo algunas se desviaban hacia lo que hoy es el centro histórico provocando inundaciones severas y encharcamientos que se tonaban verdes por la contaminación y humedad, dejando al día de hoy ese famoso nombre.
“En la calle lateral pasaba ‘la corriente’, actual calle Reforma y en esa área, a la altura de la actual calle Hidalgo, se formaba un extenso charco superficial que al estar húmedo la mayor parte del año era lamoso con su característico color verde, para su construcción se tuvo que rellenar y apisonar, desapareciendo el charco, pero sobrevivió el nombre, y al existir celdas preventivas, la gente solo decía "ya cayó en el charco verde", para indicar que fue detenido por la Policía Municipal”, relata para Imágenes Históricas el historiador Carlos Aguiñaga Morán.
En 1688 el oficial de la alcaldía Diego de Acevedo planteó al alcalde Iñiguez del Bayo la construcción de una zanja para aminorar los estragos de las lluvias, que al día de hoy se convirtió en el cruce de Pascual M. Hernández y Reforma donde se recogían los excedentes de agua de los Charcos de Santa Ana (actual estadio Plan de San Luis), siguiendo por el poniente de la ciudad y torcía por el norte para concluir al lado sur del cementerio del Montecillo o llanos de la Tinaja (patios del ferrocarril, frente a calle 20 de noviembre). A la zanja se le llamó popularmente la corriente y desapareció en los años 40s con el drenaje y adoquinado de las calles.
Edificio modificado por el tiempo
A pesar de que este edificio representa la historia potosina, no se le ha dado el valor ni el mantenimiento para su preservación, ya que el tiempo hizo la modificación total del inmueble destruyendo en su totalidad su fachada original. Actualmente el "Charco Verde" está en comodato a la DGSPM.