La empresa Pepsi se disculpó por uno de sus comerciales, en el que aparece la modelo Kendall Jenner en una manifestación, acercándose a un policía para entregarle una lata de refresco, e impedir así algún tipo de represión.
En un comunicado, la refresquera informó que optó por retirar el anuncio de sus plataformas y “detener cualquier despliegue adicional”.
Esto porque en cuanto apareció el comercial recibió críticas en redes sociales, al considerar que su contenido era una forma de trivializar la acción social y protestas como la de Black Lives Matter, en defensa de la gente negra y en contra de la represión policial en Estados Unidos.
Una de las organizadoras de las protesta Black Lives Mattter, Elle Hearns, dijo a The New York Times que el comercial “minimiza” los sacrificios que ha hecho la gente al participar en diferentes protestas.
Hearns mencionó que el comercial no refleja lo que ocurre en la vida real, ya que en una protesta nadie encuentra alegría al tomar una Pepsi.
En el anuncio se observa a gente joven y alegre, manifestándose por alguna razón que no queda clara, aunque hay algunos carteles con símbolos de paz.