Agencia | 19/04/2016 | 19:58
La travesura de un pequeño que se tragó una moneda mientras viajaba en un autobús escolar de Oklahoma desató el pánico entre los usuarios del transporte.
La conductora creyó que el niño bromeaba cuando comenzó a llorar y llamar la atención, por lo que su hermana tuvo que alertarla para que lo ayudara.
El menor estaba rojo y le faltaba la respiración. Entonces, la conductora frenó y se dirigió a él dándole primeros auxilios.
"No merezco mucho crédito. Era Dios obrando a través mío", dijo.
Sin embargo, confesó que le pidió al niño comportarse. "No lo vuelvas a hacer", le dijo."Me asustaste de muerte. Gracias a Dios que estás bien".