El Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA) es la enfermedad potencialmente mortal causada por el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), los cuales, como su nombre lo indica, causan severos daños al sistema inmune, y que como consencuencia afecta a otros sistemas.
Aunque no existe cura, el daño causado al cuerpo por estas enfermedades puede ser tratado, la educación y prevención ayudan bastante a los pacientes para que las afectaciones en otros sistemas no pongan en riesgo su vida.
Así es cómo el VIH/SIDA afecta a los sistemas del cuerpo humano:
Sistema inmunológico
El VIH es el causante de la destrucción de los glóbulos blancos de la sangre, los cuales ayudan a combatir las enfermedades.
La Mayo Clinic advierte que si el VIH no se trata a tiempo en 10 años se convertirá en SIDA y durante este periodo de tiempo cualquier enfermedad puede establecerse en el cuerpo y no curarse nunca.
Este video muestra el paso del VIH de una célula a otra:
Sistema respiratorio
Cuando el VIH se transforma en SIDA los pacientes son más propensos a padecer neumonía, afirma aids-sida.org; los expertos aseguran que una persona sin tratamiento tiene 85% de probabilidad de padecerla o bien de desarrollar tubercolosis o sarcoma de Kaposi.
Sistema nervioso
Un sistema inmune debilitado permite a bacterias y hongos infectar el sistema nervioso, lo que no sucedería con personas sanas; las más comunes asociadas a este padecimiento son: complejo demencial a causa del SIDA, linfoma y toxoplasmosis. De acuerdo con el Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares, el VIH-SIDA no invade directamente las células nerviosas, pero sí las daña.
Sus síntomas principales son dolor de cabeza, pensamiento lento, mala memoria a corto plazo, así como cambios bruscos en el comportamiento y la coordinación.
Sistema digestivo
Los trastornos gastrointestinales son de las enfermedades más comunes asociadas al VIH-SIDA. Los síntomas que se presentan con más frecuencia son: diarrea, náuseas, vómito, pérdida de peso, dolor abdominal y tumores gastrointestinales.
Un equipo de expertos de la Universidad de California en San Francisco, liderado por Joseph M. McCune, estudiaron a pacientes con SIDA y encontraron que el microbioma o conjunto de microbios que habitaban en su sistema digestivo era radicalmente distinto del de los individuos sanos. En conclusión, las personas infectadas con VIH contaban con más niveles de Pseudomonas, Salmonella, E. coli y Staphylococcus, todas ellas bacterias capaces de causar inflamación peligrosa.
Dicho estudio pudiera develar el por qué en algunos casos los tratamientos pueden no estar funcionando en algunos pacientes. McCune y su equipo creen que al tratar la flora intestinal de los pacientes pueden evitar que enfermen.
Piel
Debido a la falta de un sistema inmune funcionando al cien, cualquier padecimiento de la piel se vuelve más severo y difícil de tratar, los más comunes son: dermatitis, psoriasis y urticarias.
En 2009 en Ministerio de Salud de España informa que el 15% de las personas que fueron diagnosticadas con SIDA fue cuando desarrolló candidiasis esofágica (unos hongos que invaden la boca y el esófago).
Ojos
Es común que los pacientes contraigan infecciones oculares lo más comunes son: manchas algodonosas, retinitis por citimegalovirus (CMV, en inglés), coriorretinitis por toxoplasma, manifestaciones neurooftalmológicas, desprendimiento de retina y sarcoma de Kaposi.
Los pacientes deben someterse a revisiones regulares para evitar la pérdida de la vista de forma permanente, debido a que los expertos afirman que un 70% de pacientes con SIDA avanzado padecen algún trastorno ocular.
