El Cairo cuenta con 18 millones de habitantes y es necesario evitar el tráfico y mejorar la vida de la ciudadanía, así como crear más empleos en la nueva capital.
Tomará tiempo enfrentar al grupo Estado Islámico (EI) y la solución es tener un gobierno estable que se sume a un esfuerzo colectivo entre los países árabes, dijo el embajador de Egipto en México, Yasser Shaban.
Afirmó que “los terroristas reflejan una falsa imagen del Islam, ponen muchos obstáculos para la estabilidad y el desarrollo del país y representa todo tipo de amenazas, por eso hemos tenido que usar la fuerza”.
Superar al EI tomará tiempo, afirma el diplomático. “Desde mi punto de vista, la solución es que mientras logremos tener un gobierno estable y un esfuerzo colectivo entre los países árabes podremos manejar este problema”.
Shaban también habló sobre el proyecto que el gobierno de la República Árabe de Egipto anunció en marzo sobre construir en mitad del desierto una nueva ciudad capital que sustituya a El Cairo y que costará más de 45 mil millones de dólares.
La ciudad se llamará The Capital Cairo y construirla tomará años y contará con una pirámide de más de 200 metros de altitud, que será el mayor atractivo visual de la nueva capital. Además albergará las principales sedes del poder, como el Palacio Presidencial, el Parlamento o los edificios ministeriales.
Al respecto, el diplomático dijo que “El Cairo cuenta con 18 millones de habitantes y es necesario evitar el tráfico y mejorar la vida de la ciudadanía, así como crear más empleos en la nueva capital”.
“La nueva ciudad contaría con espacios para aeropuerto, un área de 500 kilómetros cuadrados y capacidad para siete millones de habitantes, áreas de comercios, hoteles, jardines, tierras, plantas de energía renovable para alimentar a la capital y esperamos mantenerla sólo con energía renovable”.
“La construcción empezó hace diez días y esperamos terminarla para 2018. Este proyecto creará 1.5 millones de empleos, Egipto necesita 700 mil empleos, así que el proyecto cubrirá esto durante dos años”.
El diplomático aclaró que no habrá restricción para que cualquier ciudadano que lo desee se traslade a la nueva ciudad.
Aunque admitió que “la mayoría de las personas mayores creen que sería difícil adaptarse a una nueva capital. Yo viví en el centro de El Cairo. Hay personas a quienes les será difícil llegar a sus trabajos, pero por lo menos 50% de los habitantes tomarán la decisión de mudarse”.
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