Dentro de las tradiciones de la Semana Santa o Semana Mayor, las del Sábado Santo, ante conocido como Sábado de Gloria, tiene un sabor de liberación pues cesa el ayuno y quedaron atrás los días de luto y recogimiento. Los baños a cubetazos, la quema de monigotes, desfiles festivos, y diversas expresiones en las que el ingenio popular sale a relucir caracterizan el Sábado Santo, en muchos puntos de la geografía nacional.
En algunas poblaciones, entre las que se incluyen varias de la Huasteca, durante la Quema del Judas, se leen versos, elaborados por poetas y versificadores locales, trovadores reconocidos y lugareños ingeniosos, en las que se reparten los bienes que dejó Judas, entre las personalidades de la sociedad en todos sus niveles. Una tradición que sirve para el desahogo social, para la crítica mordaz, para fustigar a quienes se pasan de vivos y para diversión de todos. A pesar de que a veces los versos suelen ser bastante fuertes en los señalamientos.
Nadie se siente agredido y ser tomado en cuenta en ellos, es una forma de saber quienes tienen estatus. Muchas veces quienes son más señalados en esas manifestaciones populares son los más entusiastas promotores y hasta patrocinadores, porque saben que su influencia e importancia se mide por la forma en que el pueblo los toma en cuenta. Aquí una modesta aproximación a lo que es el Testamento de Judas. Hay que decir que este tipo de manifestaciones populares generalmente son al filo del mediodía.
El Testamento de Judas
Soy el Judas Iscariote
Emblema de los malvados,
Sin hacer mucho borlote
A todos dejaré heredados.
A todos, sin comentarios
Dejaré mis propiedades
No necesito notarios
Yo tengo sus cualidades.
A Toranzo de herencia fiel
Le dejo a mis seguidores,
Ya todos andan con él
Ayudándole en sus labores.
Una brújula de mi caudal
A Toranzo heredada está,
Que sepa, aunque sea al final,
A dónde exactamente va.
Le heredó a Mario García
Desde ahora mis huaraches,
Que los use todos los días
Caminando entre sus baches.
Mi espíritu comunicativo
Dénselo a González Sierra,
Pues en eso es muy activo
En todo lugar de la tierra.
A Cándido qué le dejo
Pues debo darle buen trato
Dice el pueblo, por parejo,
Que él es mi vivo retrato.
A Teófilo le he dejado
El veliz de mi equipaje
Pues anda de viaje en viaje
A costillas del senado.
Oscar Vera está advertido
Que lo nombro mi abogado,
Pues como yo ha destacado
Y hasta tiene su partido.
Al rector Del Villar, sin dudas,
Desde hoy le voy a heredar
A los discípulos de Judas,
Pa’ que los ponga a estudiar.
Mi lealtad al gran Maestro
Dejo a líderes del SNTE
Que la usen de modo diestro
Para atender a su gente.
Mi poder de persuasión
Lo dejó a los candidatos,
Quieren ganar la elección
A pura lengua los ingratos.
Den a Sonia mi fotografía,
Hecha con técnicas rudas,
Publicarla bien podría,
Diciendo “Todos somos Judas”-
Una soga castigó mi hazaña
Con ella me ahorque, de verás,
Dénsela al Güero Carreras
Pa’ que amarre su campaña.
Al Calolo, sin demora
Den mis túnicas escuetas,
Pa’ que haga más camisetas
De las que anda usando ahora.
Qué le dejaré a Govea
De herencia para su avío
Si dicen que ya pelea
Teniendo todo lo mío.
Lo que aprendí en mis andanzas
Dejo al PRI pues se devela
En seguir mis enseñanzas
Y en ser mi mejor escuela.
El gas de mis intestinos
Den al Verde por favor
Dicen que huelen mejor
Que todos sus desatinos.
Al PAN dejo como herencia,
Que al fin ya la sabe usar,
Mi habilidad y experiencia
En el arte de negociar.
Al PRD qué le dejo
Pa’ agradecer sus ayudas,
Si todos dicen parejo,
Que es un refugio de Judas.
A los demás partiditos
Denles algo de mi fama,
Pues el pueblo les reclama
Que hasta en eso son mediditos.
El olor de mis axilas
Dénselo a los industriales
Pa’ que conozcan los males
Que producen sus maquilas.
A los líderes sindicales
Que les den sin dilación
Las monedas de mi traición,
Pues cobran cuotas iguales.
Voy a heredarles cuanto antes,
Mis despojos en primera instancia
A todos los comerciantes,
Hasta de eso sacaran ganancia.
A todos los policías
Dejo mis costumbres rudas
Pues dicen que en estos días
Se han vuelto el alma de Judas.
Es muy largo el testamento
Pues señalo con orgullo,
Que de Judas, al momento,
Todos reclaman lo suyo.
La Humanidad se ha empeñado
En sus actitudes rudas,
Pues de la Herencia de Judas,
Hasta hoy nadie se ha escapado.
Agarre cada quien su parte
Que cada quien, en su existencia,
Va cargando con la herencia
De mi milenario arte.