Hugo Laussín | Plano Informativo | 29/07/2012 | 10:45
Luego de que el gobierno federal anunciara la desincorporación de ingenios azucareros ahora el gobierno de Felipe Calderón pretende cerrar la controvertida expropiación de 27 ingenios decretada en 2001 por su antecesor Vicente Fox, con la venta de los últimos nueve que todavía son propiedad estatal, entre los que se incluye el Plan de San Luis.
Y es que según el acuerdo publicado en el Diario Oficial de la Federación, la Secretaría de la función Pública aprobó la venta de nueve ingenios, entre ellos el Atencingo, ubicado en Puebla; el Casasano La Abeja, de Morelos; El Modelo, de Veracruz; El Potrero, también de ese mismo estado; el Emiliano Zapata, de Morelos; La Providencia, de Veracruz; San Cristóbal y San Miguelito, ambos también de Veracruz y el Plan de San Luis, situado en la entidad potosina.
Tan sólo por indemnizaciones y pasivos, “el costo fiscal de la expropiación ascendió a 18 mil 81 millones 961 mil 900 pesos”, hasta 2010, último año auditado por la ASF.
De ese monto, 5 mil 776 millones (32 por ciento) correspondieron a los recursos públicos que el gobierno de Fox gastó en la expropiación y los restantes 12 mil 305 millones de pesos son pasivos o deuda acumulados por la Financiera Nacional Azucarera (Fina), en proceso de extinción desde hace una década, precisa el informe de fiscalización de la cuenta pública, según revelaron medios nacionales.
De los 27 ingenios expropiados hace casi 11 años, 14 fueron devueltos a sus dueños por resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y 4 fueron vendidos entre 2005 y 2011. La ASF sostiene que los nueve ingenios restantes se encuentran en “estado sub judice”, es decir, pendientes de resolución judicial.
Aunque México es autosuficiente en la producción de azúcar y es el sexto productor mundial de caña de azúcar, pero en sólo 37 años, los ingenios azucareros habrán pasado por dos procesos de expropiación y dos de privatización si se concreta la venta de los últimos ingenios estatales: El Modelo, El Potrero, La Providencia, San Cristóbal y San Miguelito, ubicados en Veracruz; Casasano La Abeja y Emiliano Zapata, en Morelos; así como Atencingo, en Puebla, y Plan de San Luis, en San Luis Potosí.
La mala administración y los graves problemas financieros que presentaban los ingenios azucareros fueron el denominador común para que gobiernos de Luis Echeverría Álvarez y el de Vicente Fox Quesada, decidieran expropiarlos: los 67 existentes en 1974 y sólo 27 de 36 que había en 2001, respectivamente