Las presiones que ejerció el tipo de cambio en el precio de diversas materias primas en el último par de meses, así como el alto costo de los combustibles, propició que diversos corporativos del sector consumo inicien el traspaso de precios al consumidor final en el último tramo del año.
PepsiCo Alimentos distribuyó entre los detallistas del área metropolitana una nueva lista de precios para los productos de confitería que estará vigente en lo que resta del año, de acuerdo con diversos comerciantes.
Los aumentos se aplicaron de manera diferenciada pero el incremento en promedio fue de un peso sobre los productos Ricolino, como las Almedras confitadas, las Gomas cubiertas de azúcar y la marca Krankys
Pedro Padierna, director general de PepsiCo Alimentos, comentó a El Universal en días recientes que su estructura de costos tenía presiones importantes por el precio de los commodities, así como de los energéticos.
“Vamos a tener qué pasar algo de precios... el reto que le estoy dando al equipo es ser extraordinariamente selectivo”, dijo Padierna.
Otra de las empresas que tuvo un ajuste en sus precios a consumidor final fue Barcel, subsidiaria de Grupo Bimbo. Marcas como Chip’s, Ondas, Takis, Tostachos, Chipotles, entre otras, reportaron un incremento promedio de un peso en la última semana, de acuerdo con diversos detallistas.
En autoservicios, analistas de UBS Investment Research detectaron un incremento de 10.3% entre septiembre y octubre en la presentación de dos litros de la marca Coca-Cola, así como un incremento de 1.9% en la marca Pepsi también de dos litros.
Starbucks Coffee también ha enfrentado presiones importantes en el costo del café debido al impacto del tipo de cambio.
María Fernanda Torres Pino, gerente de mercadotecnia de Starbucks, dijo que en lo que resta del año la empresa podría deslizar incrementos en sus productos, aunque de manera diferencia y or debajo de 3%.
“No creería que (el aumento) fuera ni en todo el menú, y no más de 3%”, dijo en entrevista.
“Posiblemente vengan algunos ajustes, ahorita para el fin de año, depende de cómo se comporte el dólar nosotros somos una empresa que tenemos algún impacto, si bien tenemos muchas cosas locales, hay cosas que compramos en dólares”, comentó.
Dijo que durante el año Starbucks Coffee México puso en marcha una serie de estrategias operativas orientadas a abatir el alto costo de los insumos básicos.
“Este año hemos hecho (incrementos) muy pequeños, menos de 2% y no en todo el menú, en diferentes bebidas”, dijo la directiva.
Expresó que a pesar de que una buena parte del café que se expende en los locales es de origen local, el café se tiene qué enviar a los Estados Unidos para ser procesado y empaquetado, de ahí que la depreciación del peso frente al dólar presione sus costos.