La empresa Operadora de Programas de Abasto Múltiple descarta por el momento realizar algún tipo de recorte en sus expectativas de crecimiento.
La empresa Operadora de Programas de Abasto Múltiple (OPAM) descarta por el momento realizar algún tipo de recorte en sus expectativas de crecimiento, ante la creciente preocupación mundial por una eventual recesión económica.
Por el contrario pretenden ir ganando terreno en el mercado de los vales y tarjetas como formas de pago no bancarios. OPAM, quien actualmente tiene mil 100 clientes y poco más de 500 mil tarjetas en circulación, planea colocar otros 200 mil plásticos más lo que la llevaría a controlar el 8% del mercado nacional de pagos electrónicos.
Daniel Calleja, director general de OPAM, dijo además que esta empresa ha iniciado ya la introducción de la primera generación de tarjetas para prestaciones empresariales y sociales, completamente biodegradables (ecovale) que al contacto con agentes naturales se degrada el material con el que están fabricadas sin dañar el ambiente.
“En México, dijo, existe un universo de aproximadamente 3 millones de tarjetas plásticas como forma de pago electrónico no bancario, por ello consideramos que esto representa una aportación real al cuidado del medio ambiente por parte de nuestra empresa”.
El mercado de las tarjetas y vales de despensa no tiene más de 20 años y en ese tiempo, empresas y gobiernos se han convencido de las bondades del producto, asegura Calleja, con el ecovale instituciones privadas y gubernamentales otorgan de una manera muy sencilla la prestación de vales de despensa, gasolina y alimentación a sus empleados.
OPAM tiene tratos comerciales con las principales cadenas de autoservicios, farmacias, tiendas de conveniencia, restaurantes, gobiernos delegacionales en la Ciudad de México y estatales. Sus productos se dividen en vales de despensa con el 85% de su mercado y vales de gasolina, vales para restaurantes y vales sociales con 5%.