Dos empleados de conocida empresa departamental, fueron descubiertos por el apoderado legal, al hurtar diez teléfonos celulares. Los mismos fueron detenidos y los objetos recuperados.
La intervención de la policía fue solicitada por el apoderado legal de la empresa FAMSA, de carretera a Rioverde, quien indicó que al realizar un arqueo en la bodega, se percataron que faltaba mercancía.
Los agentes se entrevistaron con el personal, y dos de ellos se mostraron sumamente nerviosos, los mismos cayeron en contradicciones, y terminaron por aceptar que ellos eran los responsables, y que los teléfonos los tenían en sus casas y otros los llevaban con ellos.
Los mismos hicieron entrega de 9 teléfonos de diversas marcas y modelos. Los jóvenes fueron puestos a disposición del representante social, quien habrá de definir su situación jurídica.
Los presuntos responsables son Luis Ángel Lara Reyna, de 21 años de edad, y Marco Antonio Campean Medina, de 25.