11:56 Señaló el doctor Raúl Estrada, director de la Perrera de los Servicios de Salud del Estado.
El promedio anual de sacrificios de perros en la capital potosina es de casi 7 mil debido a la recurrente problemática de perros en la calle, señaló en entrevista el doctor Raúl Estrada, director de la Perrera de los Servicios de Salud del Estado.
En los ingresos promedio de la perrera el 30% es llevado por sus dueños bajo justificantes como que el animal está viejo y enfermo, que ya no lo quieren o que es agresivo y dañino.
El 80% de las capturas ya no son reclamadas por lo que tienen que ser sacrificados en un lapso no mayor a 48 horas. El resto se divide entre dueños despistados que acuden por su mascota o los que son dados en adopción.
De acuerdo al especialista, el problema de la rabia lleva 14 años bajo control y ahora además de las enfermedades que provocan las heces de los perros, los ataques de estos a la población son lo más riesgoso.
Cuando un humano es atacado con un perro con sospechas de rabia, el can es mantenido en observación por 10 días, en base a eso y a los análisis realizados por el laboratorio de la perrera – que se encuentra catalogado como uno de los mejores del país- se dictamina si la victima de la agresión requiere o no un tratamiento.
A diferencia de la forma de operación de hace años, ahora la perrera actúa bajo el reporte de la población y no haciendo “redadas” como antes era acostumbrado.
El sacrificio o la adopción
Su llegada a la perrera representa para muchos de estos seres el fin, sin embargo, existe una alternativa para los más pequeños: la adopción. Según los criterios de la perrera los cachorros (hasta los seis meses de edad) son los candidatos a la adopción. “Un perro más grande y que siempre estuvo en las calles es muy difícil de adaptar a un ambiente familiar, ya que está acostumbrado a tener libertades y a que nadie los controle en ningún sentido. Si bien puede tener el 50% de probabilidades de una inserción a la familia con éxito está también el 50% de probabilidades de que no sea así” explica el doctor Raúl Estrada.
Aunque también hay algunas asociaciones que se llevan a los perros adultos y se encargan de educarlos y colocarlos en hogares donde serán queridos.
El proceso de adopción de un perro es muy sencillo, únicamente se requiere la mayoría de edad y tomar conciencia de que una mascota es un miembro más de la familia. Que es una decisión que implicará gastos y cuidados.
Los adultos, los que no son reclamados, los que nunca supieron lo que es tener un hogar y un dueño a quien serle fiel tiene como destino el sacrificio. De acuerdo a las normas federales para estos sitios, perros y gatos únicamente pueden ser muertos mediante electroanestecia o una sobredosis de barbitúricos.
En ambos procedimientos, está científicamente comprobado que la muerte es rápida y que no ha sufrimiento.