Un juez federal ordenó este viernes eliminar del expediente judicial la declaración de Blake Lively, tomada en el marco de su demanda por acoso sexual y represalias contra el actor y productor Justin Baldoni.
La decisión fue emitida por el juez Lewis Liman, quien señaló que la presentación casi íntegra de la transcripción de la declaración -casi 300 páginas- por parte de los representantes de Baldoni y Wayfarer Studios no servía para "ningún propósito de litigio adecuado".
La semana pasada, Lively rindió declaración en la oficina de su abogado en Nueva York, donde los abogados de Baldoni la interrogaron sobre las acusaciones de acoso sexual que presentó contra él en la demanda federal; además, enfrentó preguntas sobre su acusación de que Baldoni habría lanzado una campaña para desprestigiarla.
Los abogados de Lively sostuvieron que la publicación de la declaración completa en el expediente público fue una maniobra de los representantes de Baldoni para alimentar una campaña mediática en su contra, sin justificación legal.
Según el magistrado, únicamente se citaron dos páginas en una carta procesal, mientras que el resto parecía estar destinado a "agobiar a Lively" y fomentar titulares sensacionalistas, informó el medio internacional Deadline.
En su orden, el juez Liman coincidió con la moción de Lively para mantener sellado el testimonio, tomado el 31 de julio, y señaló que divulgarlo públicamente sería injustificado y dañino.
Además, cuestionó las intenciones de la defensa de Baldoni, sugiriendo que la inclusión de material irrelevante en el expediente formaba parte de una estrategia de relaciones públicas más que de una necesidad legal.
Las acusaciones de Lively se remontan al rodaje de Romper El Círculo, donde afirma haber sufrido comentarios sexuales no solicitados, burlas sobre su cuerpo y la inclusión de escenas íntimas improvisadas sin su consentimiento.
Baldoni ha negado rotundamente estas afirmaciones y, en respuesta, presentó una demanda por difamación y extorsión contra Lively y su esposo Ryan Reynolds por 400 millones de dólares, que fue desestimada por un juez el mes pasado.
El caso continúa su curso y se espera que ambas partes testifiquen cuando se celebre el juicio en marzo de 2026.