De enero a mayo de este año, las importaciones de maíz blanco crecieron 163.8 por ciento anual, ante un escenario de baja producción en Sinaloa, principal estado productor.
Las compras de maíz blanco al exterior en el eriodo se ubicaron en 430 mil toneladas, de acuerdo con datos de Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
Así, las importaciones, provenientes en su totalidad de Estados Unidos, ya rebasan las 200 mil toneladas de maíz blanco que se adquirieron en 2024 y representan más de 60 por ciento de la previsión de compras esperadas para este año, de 700 mil toneladas.
Las sequías en México han repercutido la producción de maíz blanco, principalmente en Sinaloa.
"La comercialización de la cosecha de maíz en Sinaloa enfrenta una de sus peores crisis. La producción estatal de maíz blanco, que alcanzó 6.5 millones de toneladas en 2023 y 3.2 millones en 2024, este año apenas llegará a 1.8 millones de toneladas.
"Esta caída histórica amenaza la economía rural, la estabilidad social y la autosuficiencia alimentaria nacional", apuntó Juan Carlos Anaya, director del GCMA, en entrevista reciente.
No obstante, para Enrique Riveros, consejero de la Asociación de Agricultores del Río Culiacán, la perspectiva es incluso más pesimista.
"Se hablaba de que se pensaba producir alrededor de 2 millones de toneladas, ahorita van a ser 1.5 millones o 1.4 millones lo que se pudiera producir aquí en Sinaloa", explicó.
Las importaciones de maíz amarillo, empleado principalmente para la agroindustria y el alimento pecuario, cayeron 9.6 por ciento de enero a mayo, a 9.4 millones de toneladas.