En el 2024, la producción de vehículos eléctricos e híbridos de EU cayó 7% anual, lo que se compensó con un alza del 100% anual en la producción de México, situación que refleja una integración regional y alianza entre ambas naciones, la cual ahora pende de un hilo por el "Big Beautiful Bill", de Donald Trump.
De acuerdo con Diana Páez, directora de Energía y Movilidad del Instituto William Davidson de la Universidad de Michigan, desde el 2020 las compañías General Motors, Ford y Stellantis -conocidas como las Tres Grandes de Detroit, Michigan- han invertido significativamente en relocalizar su cadena de suministro en la región.
"Se ve que hay una dinámica en América del Norte, en la que en Estados Unidos hubo una caída del 7% en cuanto a la producción de vehículos eléctricos, que se vio reflejada en la de México, incrementando su producción de vehículos eléctricos", dijo Páez.
"Éstas son las compañías que están con sede en Michigan, que están conectadas con todo lo que es la cadena de valor en América del Norte. México alcanzó a producir 220 mil vehículos eléctricos. Canadá sigue sin cambios; es un mercado más pequeño de producción de vehículos eléctricos".
Páez advirtió que esta integración regional podría debilitarse severamente si el Senado estadounidense aprueba la reforma a la Ley de Reducción de la Inflación del 2022 que Propone el presidente Trump, con la cual se eliminarían los créditos fiscales para la compra de vehículos eléctricos a partir del 2026.
Sin esos incentivos, según la especialista, se perderían 5 mil 300 empleos en Estados Unidos el próximo año, y la producción de vehículos eléctricos caería a nivel regional.
"Éstos son empleos relacionados con las grandes inversiones que se han hecho desde el 2020 para traer esta cadena de valor a la región", agregó.
"Si se cambian o se cancelan esos incentivos tendría un impacto enorme en Estados Unidos, México y Canadá. Sin la Ley de Reducción de la Inflación habría un retroceso tremendo en cuanto a la producción de vehículos".
Impulsada por el ex Mandatario estadounidense Joe Biden, la Ley de Reducción de la Inflación proyectaba para el 2030 un 40% de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero respecto al 2005.