Viernes 6 de Junio de 2025 | Aguascalientes.
negocios

CEO de BlackRock anticipa reglobalización centrada en trabajadores

Agencia Reforma | 03/06/2025 | 11:46

La economía global se encuentra en una situación extraña: sabemos más sobre los próximos siete años que sobre los próximos siete días, indicó Larry Fink, presidente y director ejecutivo de BlackRock, el mayor fondo de inversión del mundo.
 
En un artículo de opinión publicado en el diario Financial Times, Fink dijo que durante casi dos meses ha viajado por el mundo y ha escuchado la misma pregunta: ¿qué pasará con los aranceles? Solo hay conjeturas. El peor escenario es desolador: shocks de oferta, inflación en espiral, desaceleración económica. Pero a estas alturas, las conjeturas se han convertido en un producto básico, descontado y especulado hasta la saciedad.
 
Esa es la historia de los últimos siete días. La historia de los últimos siete años es más discreta, pero mucho más trascendental, destacó.
 
Consideró que los aranceles de la administración Trump son el síntoma de una reacción contra la era de lo que podría llamarse "globalismo sin barreras". El PIB mundial creció más desde la caída del Muro de Berlín en 1989 que en toda la historia registrada anterior. Pero los beneficios no se repartieron equitativamente.
 
Por lo tanto, no sorprende que este modelo de globalización se esté desmoronando. Pero su sustituto propuesto -el nacionalismo económico tras fronteras cerradas- ya no resulta convincente.
 
La verdadera pregunta aquí es qué reemplaza al modelo que nos llevó hasta aquí. Y la respuesta está empezando a vislumbrarse. No se trata ni del globalismo ni del proteccionismo, sino de una combinación: mercados abiertos con objetivos nacionales -y trabajadores- en mente.
 
En el corazón de este nuevo modelo se encuentran los mercados de capitales: bolsas donde la gente invierte en acciones, bonos, infraestructura, en todo.
 
¿El primer paso? Ayudar a más personas a convertirse en inversionistas. Este es el cambio más profundo que estoy observando en la economía. Los gobiernos se están replanteando para quién son los mercados. Ahora, los países están democratizando los mercados al reconocer que el mismo trabajador de fábrica que la globalización dejó atrás también puede ser un inversionista.
 
Por supuesto, la expansión de los mercados no lo solucionará todo. Si no se controla, la financiarización puede alimentar la desigualdad.
 
Ese fue el primer borrador de la globalización: una riqueza enorme, distribuida de forma desigual, sin pensar en quién se beneficiaba ni dónde.
 
Lo que está surgiendo ahora es el segundo borrador de la globalización, una reglobalización diseñada no solo para generar prosperidad, sino para dirigirla hacia las personas y los lugares que quedaron atrás la primera vez.