El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reaccionó este jueves al tiroteo mortal que dejó dos víctimas en la Universidad Estatal de Florida (FSU, por sus siglas en inglés). en Tallahassee, ocurrido unas horas antes.
Trump consideró que este evento fue “terrible” y “una vergüenza”, según aseguró durante declaraciones desde el Despacho Oval el jueves. Sin embargo, descartó la posibilidad de que el incidente impulse cambios en las leyes de armas del país.
“Soy un gran defensor de la Segunda Enmienda. Lo he sido desde el principio. La he protegido, y estas cosas son terribles”, dijo Trump a los periodistas cuando se le preguntó sobre posibles fallos en la legislación actual sobre armas.
“Pero el arma no dispara, las personas lo hacen. Es, ya sabes, una frase que se usa probablemente demasiado a menudo”, agregó.
Promete ampliar sus comentarios al recibir más detalles
El tiroteo en FSU dejó al menos dos personas muertas y seis heridas hospitalizadas, según las autoridades. El presunto tirador, identificado como el hijo de un ayudante del sheriff del condado de Leon, está bajo custodia.
Trump señaló que aún estaba recibiendo detalles sobre el incidente, pero prometió abordarlo con más detalle una vez que se dispusiera de más información. “Conozco bien la zona”, añadió.
Firme defensor de los derechos a portar armas, Trump ha prometido constantemente proteger la Segunda Enmienda, habiendo hablado en numerosos eventos de la Asociación Nacional del Rifle a lo largo de su carrera política. Tras un tiroteo escolar en 2018, convocó a legisladores para discutir las leyes de armas, pero el Congreso no aprobó ninguna legislación.
Los comentarios de Trump se producen mientras las autoridades continúan investigando las circunstancias que rodean el tiroteo en FSU, sin que se hayan revelado aún detalles adicionales sobre el motivo o los eventos que condujeron a la tragedia.
Presunto tirador habría usado pistola que pertenecía a su madre policía
El presunto tirador fue identificado como un joven de 20 años, hijo de una ayudante del sheriff, quien abrió fuego este jueves en la Universidad Estatal de Florida (FSU) con un arma que había sido de servicio de su madre, matando a dos personas e hiriendo al menos a otras seis, según informaron los investigadores.
Los agentes llegaron rápidamente al lugar y dispararon e hirieron al atacante después de que este se negara a acatar las órdenes, informó el jefe de policía de Tallahassee, Lawrence Revell.
Las autoridades aún no han revelado el motivo del tiroteo, que comenzó alrededor del mediodía justo fuera del centro estudiantil, lo que llevó a estudiantes y padres aterrorizados a buscar refugio en una bolera y en un ascensor de carga dentro del edificio.
Se cree que el atacante, identificado por la policía como Phoenix Ikner, es estudiante de la Universidad Estatal de Florida, según los investigadores. Las dos personas que murieron no eran estudiantes, aclaró el jefe de policía de FSU, Jason Trumbower, quien añadió que no se divulgará información adicional sobre las víctimas por el momento.
El tirador obtuvo acceso a un arma que pertenecía a su madre, quien ha trabajado en la oficina del sheriff del condado de Leon durante más de 18 años y ha sido una empleada ejemplar, según el sheriff Walt McNeil. La policía cree que Ikner disparó a las víctimas con la antigua pistola de servicio de su madre, la cual ella había conservado para uso personal después de que el cuerpo policial actualizara sus armas.