Los casos de Viruela Símica, conocida como "viruela del mono" en México han registrado un alarmante incremento en solo una semana. De acuerdo con la Secretaría de Salud (SSa), a través del Instituto Nacional de Diagnóstico Epidemiológico (INDRE) el número de contagios aumentó un 53.5%, alcanzando un total de 28 casos, de los cuales 13 se reportaron en los últimos siete días.
La Ciudad de México concentra el 50% de los contagios, mientras que Aguascalientes ha notificado cinco casos. En Jalisco se reportan tres infecciones, mientras que Oaxaca, Chiapas, Nayarit y el Estado de México registran un caso cada uno. En la entidad, en el municipio de Tepic un hombre fue la persona identificada con esta enfermedad, según las autoridades locales ya se encuentran recuperación.
"Este es un masculino con derechohabiencia del IMSS, que se mandó a confirmar y es un caso positivo. Cuando se detecta el caso, se hace la identificación de las personas que pudieron tener contacto, tanto al interior del domicilio como en áreas externas donde se haya relacionado. Se hizo un cerco sanitario, no se ha confirmado otro caso" declaró Beatriz Ruiz Huerta secretaria de salud de Nayarit para medios locales.
¿Cuáles son los síntomas para saber si estoy infectado?
Los signos y síntomas suelen comenzar una semana después de la exposición, pero pueden hacerlo pasados 1 a 21 días. Suelen durar de 2 a 4 semanas, o más en personas con sistema inmunitario debilitado.
Síntomas frecuentes:
• Erupción cutánea
• Fiebre
• Dolor de garganta
• Dolor de cabeza
• Dolores musculares
• Dolor de espalda
• Falta de energía
• Ganglios linfáticos inflamados
En algunos casos el primer síntoma es una erupción cutánea, pero otros pueden presentar antes síntomas diferentes.
¿Qué es la viruela de mono y cómo prevenirla?
La viruela del mono, también conocida como monkeypox en inglés, es una enfermedad viral rara que es causada por el virus de la viruela del mono, un miembro de la familia Orthopoxvirus. Originalmente identificada en monos en 1958, la viruela del mono se detectó por primera vez en humanos en 1970 en la República Democrática del Congo. El virus se transmite principalmente de animales a humanos, pero también puede propagarse entre personas a través del contacto directo con fluidos corporales, lesiones en la piel o superficies contaminadas.
Los síntomas iniciales incluyen fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular, y fatiga, seguidos de la aparición de erupciones en la piel que evolucionan en pápulas, vesículas, costras y, finalmente, se caen. Estas erupciones suelen comenzar en la cara y luego se diseminan a otras partes del cuerpo. En algunos casos, puede haber complicaciones como infecciones secundarias.
Transmisión:
• La viruela del mono se transmite principalmente por:
• Contacto cercano con personas infectadas: A través de fluidos corporales o contacto directo con las lesiones.
• Contacto con animales infectados: Especialmente roedores y primates, que pueden ser portadores del virus.
• Contacto con objetos contaminados: Como ropa o sábanas que hayan estado en contacto con el virus.
Prevención y tratamiento:
• Vacunación: Existen vacunas que ofrecen protección contra la viruela del mono. La vacuna contra la viruela humana (ya erradicada en 1980) también puede brindar una protección cruzada, aunque la principal estrategia de prevención en la actualidad es el uso de una vacuna específica para la viruela del mono.
• Aislamiento y cuarentena: Las personas infectadas deben ser aisladas para evitar la propagación del virus a otras personas, especialmente durante la fase de erupción cutánea.
• Medidas de protección personal: Uso de mascarillas y guantes para prevenir el contacto con fluidos corporales o lesiones de personas infectadas.
• Tratamiento: No existe un tratamiento antiviral específico para la viruela del mono, pero los síntomas pueden ser manejados con medicamentos para reducir la fiebre y aliviar el dolor. En algunos casos, pueden usarse antivirales como el tecovirimat para tratar infecciones graves.
Si bien la viruela del mono no tiene una alta tasa de mortalidad en comparación con otras enfermedades virales, puede ser grave en algunos casos, especialmente en personas con sistemas inmunitarios debilitados. Ante cualquier sospecha de infección, es importante consultar a un profesional de salud para recibir un diagnóstico adecuado y evitar su propagación.