El Descubrimiento
Una posible "súper-Tierra" orbita alrededor de una estrella relativamente cercana, similar al Sol, y podría ser un mundo habitable, pero de cambios extremos de temperatura, desde el calor abrasador hasta el congelamiento.
Datos clave
El planeta recién confirmado es el más externo de los tres detectados hasta ahora alrededor de una estrella llamada HD 20794, a solo 20 años luz de la Tierra. Su órbita de 647 días es comparable a la de Marte en nuestro sistema solar. Pero la órbita de este planeta es muy excéntrica, estirada en forma ovalada. Eso acerca el planeta lo suficiente a la estrella como para experimentar un calentamiento descontrolado durante parte de su año, y luego lo lleva lo suficientemente lejos como para congelar cualquier agua potencial en su superficie. El planeta ha estado rebotando entre estos extremos aproximadamente cada 300 días, tal vez durante miles de millones de años.
Detalles
El planeta pasa una buena parte de su año en la "zona habitable" alrededor de su estrella, la distancia orbital que permitiría que se forme agua líquida en la superficie en las condiciones atmosféricas adecuadas. Pero debido a su órbita excéntrica, se mueve a una distancia interior hasta el borde interior de la zona habitable cuando está más cerca de la estrella, y fuera del borde exterior cuando está más lejos. En su punto más cercano, la distancia del planeta a la estrella es comparable a la distancia de Venus al Sol; en su punto más lejano, es casi el doble de la distancia de la Tierra al Sol. El planeta es posiblemente rocoso, como la Tierra, pero podría ser una versión más pesada, aproximadamente seis veces más masivo que nuestro planeta natal.
Star HD 20794 y su grupo de posibles planetas han sido ampliamente estudiados, pero el equipo internacional de astrónomos que confirmó el planeta exterior, dirigido por Nicola Nari de Light Bridges S.L. y el Instituto de Astrofísica de Canarias, examinó más de 20 años de datos para precisar las órbitas y las masas probables de los tres planetas.
Los científicos se basaron en datos de dos instrumentos de precisión terrestres: HARPS, el Buscador de Planetas de Velocidad Radial de Alta Precisión en La Silla, Chile, y ESPRESSO, el Espectrógrafo Echelle para Exoplanetas Rocosos y Observaciones Espectroscópicas Estables en Paranal, Chile. Ambos instrumentos, conectados a potentes telescopios, miden pequeños cambios en el espectro de luz de las estrellas, causados por la gravedad de los planetas que tiran de la estrella de un lado a otro mientras orbitan.
Pero estos pequeños cambios en el espectro de la estrella también pueden ser causados por impostores: manchas, llamaradas u otra actividad en la superficie de la estrella, que se arrastra a medida que la estrella gira y se hace pasar por planetas en órbita. El equipo científico pasó años analizando minuciosamente los cambios de espectro, o datos de "velocidad radial", en busca de cualquier signo de ruido de fondo o incluso fluctuaciones de los propios instrumentos. Confirmaron la reputación de HD 20794 como una estrella bastante tranquila, no propensa a estallidos que podrían confundirse con signos de planetas en órbita.
Datos curiosos
La supertierra en órbita elíptica parece ser un objetivo ideal para los futuros telescopios espaciales diseñados para buscar mundos habitables, en busca de posibles signos de vida. En lo alto de la lista se encuentra el Observatorio de Mundos Habitables de la NASA, que algún día examinará las atmósferas de planetas del tamaño de la Tierra alrededor de estrellas similares al Sol. Cuando se lance en las próximas décadas, el observatorio difundiría la luz de dichos planetas en un espectro para determinar qué gases están presentes, incluidos aquellos que podrían revelar alguna forma de vida. La relativa proximidad de HD 20974, a solo 20 años luz de distancia, su brillo y su bajo nivel de actividad superficial, sin mencionar los salvajes cambios de temperatura del tercer planeta, podrían hacer de este sistema un candidato principal para el escrutinio de HWO.
Los descubridores
El equipo científico internacional que confirmó la excéntrica supertierra estuvo dirigido por el investigador Nicola Nari, de Light Bridges S.L. y el Instituto de Astrofísica de Canarias, e incluyó al Dr. Michael Cretignier, de la Universidad de Oxford, quien captó por primera vez la señal del posible planeta en 2022. Su artículo, "Revisitando el sistema multiplanetario de la estrella cercana HD 20794", fue publicado en línea por la revista Astronomy and Astrophysics en enero de 2025.
