El Gobierno de Donald Trump destituyó al director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), John Vitello, debido a su desempeño, que no cumplió con las expectativas del presidente en cuanto a la rapidez de las deportaciones.
La decisión responde a una creciente frustración por los avances lentos en la implementación de la política migratoria, según medios estadounidenses.
El cese de Vitello, un veterano funcionario del ICE, se suma a la destitución de otros 2 altos cargos de la agencia a principios de febrero. Se espera que la administración anuncie pronto a un nuevo líder interino y refuerce el personal dedicado a inmigración, según fuentes citadas por The Wall Street Journal.
Tanto Trump como Tom Homan, el zar fronterizo encargado del plan de deportaciones masivas, han expresado su descontento con los resultados obtenidos en el primer mes de Gobierno. En algunos casos, se han impuesto cuotas mínimas de detenciones diarias, que llegan hasta 75 arrestos por oficina.
La administración también planea la creación de un centro de deportaciones en Fort Bliss, cerca de El Paso, Texas, con capacidad para retener a 10 mil personas mientras se procesa su expulsión. Además, se proyecta la construcción de centros de detención a nivel nacional, según funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional, citados por The New York Times.
Vitello ha sido reubicado en otro puesto, en el que supervisará “todas las operaciones sobre el terreno y de cumplimiento de la ley”, según indicó un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional a Politico.
