La noche oscura, estrellada pero negra, apenas se reconoce las sombras, los gatos y los vampiros privilegiados, fueron creados con agudeza en sus ojos y radar para guiarse en la sombra que da la noche. Aparecen de pronto destellos de luz, de alguna luciérnaga llamando a sus pares. En algún lugar se ve la luz que a lo lejos ilumina la bóveda celeste, creado por el intenso reflejo de la ciudad. La noche es para algunos el refugio de animales, para otros es el mejor tiempo para alimentarse y procrearse. La tenebrosidad que nos da la obscuridad tiene vida y muerte, tiene el momento feliz y la tragedia también.
Para los hombres que crearon a dios, fue por la necesidad de encontrar una respuesta a todas aquellas dudas que no tenían respuestas, si la gente moría en una terrible peste, era un castigo divino, no se ponían a pensar que podía haber surgido por el piquete de algún animal o las condiciones insalubres como se vivía. La superstición que existía en la Edad Media no les permitía entrar en reflexión, aquel que lo hiciere formaría parte de los rebeldes a Dios, se les perseguía y después se les quemaba vivos.
Para Frederick Nietzsche no hay noche obscuras, ni miedos a la verdad, en su filosofía busca entender al hombre, sobre todo aquellos humanos de espíritu libre, que le cancele la idea que Dios es el creador y nada después de eso es voluntad del hombre. Al presentar al hombre libre, asume en ese momento el nacimiento de un superhombre, o de igual manera la extinción del hombre. Si Dios muere, se le otorga el máximo poder al humano, la supremacía sobre la razón, la ciencia, la técnica y la decisión personal del libre albedrio, es en sí mismo el inventor de su propia felicidad.
El hombre se desprecia y enaltece a sí mismo, se enorgullece de su obra, con el poder puede autodestruirse.
Tal vez parezca absurdo o imposible, pero el humanismo nace del deseo único de pertenencia, seres únicos, de libre pensamiento y acción, así como afirmar que no se necesita a Dios.
Asumirse como tal el nuevo Dios poderoso e intolerante, recordemos a Trump recibiendo la homilía el día de la toma de posesión, la pastora haciendo súplica por los migrantes; Él, sereno, replicó molesto, “es lo más horrible que haya escuchado” ,“nos son las suplicas del pueblo norteamericano”. Esto bastó para saber que vendría después, actuando con el albedrio libre de los norteamericanos, hoy da muestras de lo que es un fascista, donde su propia religión es el maso y la bota.
Trump recibe en un acto parecido al de Hitler y Mussolini en los albores de la Segunda Guerra mundial, para decidir sobre los territorios a conquistar. Con placida bienvenida, Donald abraza Benjamín Netanyahu líder inmoral de los judíos, Trump le da la mano, lo conduce al interior de la Casa Blanca, viejos amigos con la sonrisa permanente deciden que los 2 millones de palestinos de Gaza, deben ser reubicados en Egipto y Jordania. Israel le “cede el territorio de Gaza ( como si fuera de ellos) y los Estados Unidos lo tomaría como una propiedad, desescombrando la muerte para construir una “Riviera de Oriente Medio”, no importa si bajo los cimientos de la nueva Sodoma, se encuentren enterrados 45mil palestinos que murieron bajo el fuego genocida del sionismo judío israelita. Lo mejor es disfrutar las playas robadas.
Llegó el 3 de febrero, la llamada esperada, el mundo en vilo, la presidenta de México a las 9 am, pone en la balanza de la opinión pública los resultados de la negociación con el “chango rubio” de Donald Trump. 10 mil elementos de la Guardia Nacional a la frontera, ellos, trabajar más por evitar la entrada de arma, trabajo conjunto en seguridad y comercio, resultado una pausa de un mes. Para aquellos que no saben de una negociación, una pausa es para ganar ambas partes, para establecer nuevas rutas de consenso. En lo ya no tan inaudito, los que dejaron ver sus miserias, fueron los partidos en extinción de PAN y PRI, aun con los resultados como perros aporreados, no podían creer el poder de negociación de Claudia Sheinbaum.
La periodista Frida Gómez los describe como los nuevos tlaxcaltecas, en la oposición son “incapaces de tener visión de futuro, mínima conciencia sobre sus actos, no logran entender que el país es mucho más que su fracción parlamentaria”, “creen que su marcada sumisión, les hará merecedores de alguna confianza de parte de los EU”. Tal como los Tlaxcaltecas se unieron a los conquistadores para ser parte de los nuevos opresores y terminaron minando a su propio pueblo, convirtiéndolos en esclavos.
Tanto es la rabia de los PRIANISTAS, que pusieron su dignidad como mexicanos, se sintieron merecedores de formular la idea intervencionista, una tal que pudiera contravenir el respaldo de millones de mexicanos que tienen Claudia Sheinbaum. La oposición “Desea jugar al conquistador, al aliado del interventor”, “aun cuando fueron en mayor proporción parte del problema, con narcogobiernos sentenciados, declarados y probados, intervengan fuerzas militares norteamericanas”. Hoy seguramente lloran como Cortez en la noche triste, no en un árbol de ahuehuete, lloran en sus oficinas donde antes se tramaban los pactos con criminales que hicieron millonarios a muchos, y esos pisos de encino que tantos pasaron por ahí, hoy solo quedan los recuerdos de una militancia maltrecha, mínima y en éxodo.
Traidores, una palabra que los describe es poca cosa, son la escoria más mundana que puede tener el país en este momento.
Del terruño
Mucho que decir, muchísimo que analizar, perdón, pero hay en ocasiones cosas de relevancia mundial, aunque parezca un poco ególatra, algo se pega. Las redes sociales se llenaron de transmisiones en vivo, del gobernador y del edil, sus mensajes no tan diferentes. San Luis Potosí, cuenta con sus gobernantes fieles a su palabra “cumplir y hacer cumplir las leyes”, con eso del 5 de febrero. Sendos actos con escenografía y toda la cosa, para defender lo indefendible y a la vista del escrutinio público, la nula transparencia que existe en ambos bandos, y digo bandos, porque ya no se hayan el uno del otro.
Por el bien de la patria chica, pónganse a trabajar. No por mucha selfi se avanza más temprano.