Armando Limón | 26/08/2024 | 08:49
EL PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL López Obrador realizó su última visita a San Luis Potosí, acompañado de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, para inaugurar la renovación de la carretera Ciudad Valles-Tamazunchale; y ambos refrendaron su respaldo al gobernador Ricardo Gallardo Cardona para continuar transformando a la entidad y llevar más bienestar sociales a las familias potosinas.
CON VARIOS MENSAJES implícitos en los discursos, quedó de manifiesto que después del proceso electoral del 2 de junio pasado, Gallardo Cardona se ha revelado como uno de los liderazgos más importantes del Partido Verde Ecologista de México, el cual se convirtió en la segunda fuerza partidista del país, con 77 diputados federales, que ya se denomina la “Pollo Bancada”.
EL MANDATARIO POTOSINO contribuyó para lograr la mayoría calificada en la Cámara de Diputados al lado de Morena y el Partido del Trabajo, aportó seis de siete diputaciones federales, dos senadurías, la de Ruth González Silva y Gilberto Hernández Villafuerte, por lo que se espera que esto se traduzca en mayores apoyos al gobierno estatal para proyectos de infraestructura de alto impacto y mejoría de las condiciones de vida de la población.
LA COALICIÓN ELECTORAL DE Morena, PVEM y PT en los hechos continuará en el Cámara de Diputados y el Senado, actuarán como un sólido bloque para lograr la aprobación de las reformas, como ya sucede con la judicial y están en curso las que van a desaparecer los organismos autónomos que no cumplen con su función y representan una sangría cuantiosa al erario federal; y la oposición quedó muy disminuida, luce desorientada, desarticulada y sin rumbo, no tiene ninguna posibilidad de frenar las reformas.
Pero el panorama para Morena en San Luis Potosí no es del todo promisorio, crecen las pugnas y la dirigencia estatal no termina de asentarse, Rita Ozalia Rodríguez Velázquez es objeto de una campaña de ataques y descrédito promovida por el empresario Gerardo Sánchez Zumaya desde las redes sociales y con expresiones que rayan en la misoginia, la considera sin méritos ni capacidad política y la reduce a una simple ama de casa que no debería dirigir el partido.
CON ESTAS ACCIONES Y pronunciamientos inapropiados, Sánchez Zumaya intenta acelerar el proceso sucesorio con su destape como aspirante a la gubernatura, cuando en realidad es más panista como toda su familia y sus parientes, los Azuara Zúñiga, se dice morenista solo porque gracias al gobierno federal ha logrado acumular una fortuna con diversos contratos obtenidos en Tabasco, entidad en la que quiso proyectarse como candidato a gobernador sin ningún eco.
HA SEMBRADO LA DISCORDIA EN Morena con el propósito de hacerse del control del partido y atraer el apoyo de las diversas corrientes internas, sobre todo las que salieron lastimadas con el arribo de Rita Ozalia, enviada por la cúpula de la 4T como una concesión a su hermana Rosa Icela Rodríguez, titular de Seguridad federal y próxima secretaria de Gobernación.
PERO LOS HECHOS DEMUESTRAN que Sánchez Zumaya es el que carece de experiencia política, tiene una lectura muy equivocada de la composición de fuerzas de la izquierda y de la coyuntura actual, ignora las líneas de la dirigencia nacional, anda muy acelerado repartiendo dinero y dádivas para ganarse simpatías; el derroche, la ostentación y fanfarronerías pueden acabar pronto con sus ambiciones políticas.