WhatsApp es una forma de comunicación que se ha vuelto altamente popular en los últimos tiempos, sin contar que se pueden enviar múltiples tipos de archivos multimedia, incluyendo audios, fotos, imágenes o cuestiones más específicas como la ubicación en tiempo real.
Sin embargo, siempre hay algunos tips que pueden ser de gran utilidad ya sea para sacarle el mayor provecho a las funciones, e, incluso, para ayudarte a proteger tu privacidad.
Uno de ellos es el usar la herramienta para enviar imágenes, la cual ha llegado a ser sustituida por la de documentos por algunos usuarios, esto con la finalidad de que los archivos no pierdan calidad en el momento de ser enviadas.
Sin embargo, existe un potencial peligro de privacidad al momento de hacer esto y te contamos cuál es.
La diferencia converge en dos grandes puntos: cuando mandas una imagen, se crea una especie de copia comprimida con una menor calidad; mientras que, cuando mandas una imagen como documento, mandas el archivo con la información completa, lo cual mantiene la calidad original pero lleva consigo otras cuestiones.
El problema radica en que, al mandar una imagen como documento, los metadatos de la imagen se mantendrán, y quien llegue a tener este archivo, podría acceder a información personal e, incluso, la ubicación exacta donde fue tomada. La alternativa a esto es usar la opción de mandar la imagen en alta definición (antes de mandar la foto, se presiona un botón que tiene la leyenda "HD").
De este modo, la imagen tendrá una buena definición aunque quizás no la original. Asimismo, podrías seguir enviando imágenes como documentos pero únicamente con usuarios de alta confianza.