¿Es bueno pasar todo el día en casa?

Contar con un refugio donde poder estar seguros y confortables es una necesidad humana básica. Todos experimentamos alguna vez un deseo fuerte de simplemente volver a casa para sentirnos tranquilos y a gusto.

Sin embargo, la ciencia ha demostrado que estar demasiado tiempo dentro de casa no resulta beneficioso para nuestra salud física y mental. Descubre las razones a continuación.

1. Puede desencadenar ansiedad e insomnio
Si bien es cierto que los seres humanos tenemos la necesidad de un refugio que nos cobije, todo exceso puede ser negativo. Pasar demasiado tiempo dentro de casa puede disparar la ansiedad.

En otras palabras, es probable que surjan pensamientos que nos generen miedo sobre el futuro. Al no tener contacto con el afuera, cuesta más relativizar las situaciones que estamos viviendo.

Una consecuencia de la ansiedad es sin duda el insomnio que, a su vez, genera malestares físicos y malhumor.

2. La falta de luz solar puede afectar nuestro bienestar
Un estudio publicado en 2013 confirma que la luz eléctrica y la ausencia de luz natural alteran los ritmos internos de los seres humanos, tal y como sucede con los turnos nocturnos laborales y el jet lag.

Por el contrario, la exposición a los rayos solares nos ayuda a calibrar los ritmos circadianos, que regulan nuestro cuerpo y mente (desde el apetito hasta estado de ánimo).

Es más, la falta de contacto con el afuera puede influenciarnos para utilizar dispositivos electrónicos por un tiempo más prolongado, lo que conlleva más sedentarismo y una mayor radiación electromagnética.

3. Puede fomentar el sedentarismo
De por sí ya vivimos en una sociedad en la que se fomenta el sedentarismo, ya sea por los empleos actuales como por la forma de vida. Si a este ritmo le sumamos varios días dentro de casa, el resultado puede ser bastante negativo para nuestra salud.

En caso de que no puedas salir por cuestiones climáticas, puedes buscar algún video tutorial de ejercicios o baile que te distienda y te ayude a poner en movimiento el cuerpo.

Si el tiempo está agradable, aprovecha para salir a caminar, tomar aire fresco y recargar tus energías en la naturaleza.

Quedarnos un día dentro de casa, por supuesto, no resultará perjudicial para nuestra salud. Sin embargo, como hemos visto, hacerlo por períodos de tiempo prolongados sí puede provocar consecuencias negativas tanto en nuestra salud física como mental.

Simplemente se trata de tomar algunos rayos de sol (siempre con protección), priorizar el contacto con la naturaleza y ponerle atención al movimiento de nuestro cuerpo.