El fútbol da revanchas, y para Cristian "Chicote" Calderón, esa oportunidad podría llegar más pronto de lo esperado. Tras un año de contrastes y una eliminación dolorosa en Cuartos de Final, el Club América ya planifica su plantilla para el Clausura 2026, y el nombre de un viejo conocido encabeza la lista de prioridades.
A pesar de haber salido rumbo al Necaxa hace apenas unos meses, el lateral mexicano ha dejado una huella profunda en Coapa. Lo que comenzó entre dudas y críticas por su pasado, terminó convirtiéndose en una historia de éxito donde Calderón fue pieza fundamental en la consecución de títulos bajo el mando de André Jardine.
No es un secreto que el estratega brasileño valora la disciplina táctica y, sobre todo, la polivalencia. Fuentes cercanas al club indican que Jardine ve en el "Chicote" a un elemento capaz de cubrir diversas zonas del campo, algo vital en un torneo que será atípico debido a la cercanía con el Mundial 2026.
Calderón, quien en su momento no deseaba abandonar la institución azulcrema, se mantuvo como uno de los favoritos del vestidor y de la afición gracias a su entrega. Ahora, esa "garra" mostrada en su primera etapa le abre las puertas para una segunda oportunidad en el equipo más ganador de México.
El torneo Clausura 2026 no será uno cualquiera. Al ser la última competencia antes de la justa mundialista, el América busca blindarse. Si Calderón no llega a ser convocado por la Selección Mexicana, se convertiría en un activo de lujo para el club durante la Liguilla, garantizando un jugador de alto nivel totalmente enfocado en el éxito de las Águilas mientras otros seleccionados podrían estar concentrados con sus respectivos países.
Aunque por el momento no existe una oferta formal sobre el escritorio de la directiva hidrocálida, el interés es real. La directiva americanista analiza la viabilidad económica y deportiva de la operación, sabiendo que el jugador conoce el sistema de juego y no requeriría tiempo de adaptación.
El "Chicote" pasó de ser un refuerzo cuestionado a un estandarte de la afición, y su regreso marcaría el primer gran movimiento del América en busca de recuperar la corona en un año histórico para el fútbol mexicano.