El 12 de diciembre de 1976 fue una fecha muy especial para el futbol en San Luis Potosí, ya que se disputó la primera edición del Clásico Potosino, un duelo que solo tuvo dos ediciones, pero que quedó escrito con letras de oro. El Plan de San Luis se dividió entre Santos y Cachorros; burgueses y proletarios, enfrentados, pero unidos por un sueño que duró poco.
En el Día de la Virgen de Guadalupe, el Coloso de Alamitos lució lleno a tope. Aquel primer derbi se jugó en una época en la que los Pumas de Hugo y Cabinho, el América de Reinoso, el Cruz Azul de Miguel Marín, la U de G de los Leones Negros y el Toluca de Estupiñán marcaban el ritmo del futbol mexicano.
El Atlético Potosino tenía como figura a un joven Nery Castillo, que ya comenzaba a marcar diferencia. Por su parte, San Luis contaba entre sus filas con el paraguayo Juan Ramón Ocampos, goleador del equipo con ocho tantos.
En la Fecha 14 del torneo 1976-77, un empate a un gol selló la máxima igualdad entre los potosinos. Eduardo Cisneros, al minuto 30, puso en ventaja al Atlético, pero Ricardo Mendoza igualó al 80 para el marcador final.
La segunda edición del clásico se disputó en la Fecha 33, donde los auriazules se impusieron por 2-0, con goles de sabor guaraní, obra de Céspedes y Ocampo. Al final, ambos equipos lograron clasificar a la fase final gracias a su posición en sus respectivos grupos.
Potosino terminó segundo del Grupo 2, detrás de Pumas, con un balance de 16 victorias, 11 empates y 11 derrotas. San Luis, por su parte, fue segundo del Grupo 3, solo por debajo de Cruz Azul, con 10 triunfos, 19 empates y 9 derrotas.
No coincidieron en la Liguilla y ambos quedaron eliminados en la fase de grupos, terminando terceros. Tras finalizar la campaña, San Luis fue vendido a Tampico, dejando a la capital potosina únicamente con el Atlético, que representó al estado en el Máximo Circuito hasta 1989, con múltiples anécdotas y recuerdos imborrables.
El Derbi Potosino, el Clásico de la Enchilada o cualquiera de los tantos nombres que pudo tener esta rivalidad, solo vivió dos capítulos. Es difícil imaginar que algo así vuelva a repetirse. Lo más cercano se dio en los años noventa, con el Real San Luis en Primera A y el Atlético San Luis en Segunda División.
Son 49 años de una fecha muy especial. Cuarenta y nueve años que pasaron rápido para algunos y que, para quienes no lo vivimos, nos obligan a imaginar una ciudad dividida en colores, pero unida por la misma ilusión.
