Christian Horner, uno de los directores más influyentes en la historia reciente de la Fórmula 1, estaría muy cerca de regresar al paddock. Tras su abrupta salida de Red Bull Racing en julio de 2025, varios medios europeos aseguran que su retorno podría darse mucho antes de lo previsto y de la mano de Aston Martin, equipo que atraviesa un proceso interno de reestructuración.

De acuerdo con BBC Sport, la escudería británica analiza la posibilidad de prescindir de Andy Cowell, actual CEO y director del equipo. En caso de concretarse su salida, Horner es uno de los nombres más fuertes para ocupar el puesto, especialmente de cara al ciclo 2026, cuando entrarán en vigor los nuevos reglamentos técnicos y la alineación con Honda tomará mayor relevancia en el proyecto.

El movimiento no sería aislado. En medio de esta posible reconfiguración, también se especula sobre la partida de Adrian Newey, socio técnico y uno de los cerebros más respetados en el diseño aerodinámico, lo que abriría aún más la puerta a un cambio profundo en la estructura.

Aun sin confirmación oficial sobre la salida de Cowell, Aston Martin ya maneja varios perfiles para el cargo: Andreas Seidl, exdirector de McLaren y actual jefe del proyecto Audi F1; Mattia Binotto, expresidente de Ferrari y hoy involucrado con Audi; y Martin Whitmarsh, quien ya fungió como CEO del equipo. El dueño Lawrence Stroll busca un liderazgo sólido y experimentado para reposicionar al equipo tras un 2025 de resultados irregulares.

Mientras tanto, el impacto de la salida de Horner aún se siente en Red Bull. Max Verstappen, en entrevista con The Telegraph, reconoció que el ambiente dentro del equipo ha mejorado: “Estoy muy contento con cómo va todo ahora, no solo con Laurent, sino con todo Red Bull Racing. Mucha gente sabía que las cosas no iban bien, pero no siempre es fácil solucionarlo”.

El británico dejó Red Bull en medio de una tormenta interna que incluyó tensiones con la directiva, disputas de poder y señales de desgaste en la relación con algunos miembros clave del equipo. Su posible llegada a Aston Martin podría transformar por completo el futuro inmediato de la escudería, que aspira a pelear por podios y consolidarse como protagonista en la nueva era de la Fórmula 1.