En un partido cargado de tensión, Real Oviedo y Rayo Vallecano igualaron 0-0 en el estadio Carlos Tartiere, en el duelo correspondiente a la Jornada 13 de LaLiga. Aunque el marcador no se movió, el encuentro estuvo lleno de acciones determinantes, intervenciones defensivas cruciales y un ambiente de máxima exigencia para ambos equipos.
El resultado dejó sensaciones contrastantes en las dos escuadras, que buscaron el triunfo hasta los últimos minutos, pero se toparon con la falta de eficacia y con un par de postes que evitaron lo que pudieron ser auténticos golazos. El empate, finalmente, no dejó del todo satisfecho a ninguno.
¿Quién dominó el partido en el Carlos Tartiere?
El gran protagonista del enfrentamiento fue Florian Lejeune. El defensor del Rayo Vallecano tuvo una actuación sobresaliente, convirtiéndose en el mejor jugador del partido gracias a su lectura defensiva y capacidad para anticipar. Lejeune logró quitar dos balones claves y despejó cuatro pelotas que amenazaban con terminar en situaciones de peligro para su equipo.
Por el lado del Real Oviedo, destacó Leander Dendoncker, quien firmó una sólida presentación en el mediocampo. El belga completó 18 pases correctos, robó dos balones e impuso orden en una zona en la que el partido se volvió especialmente físico. Su desempeño fue vital para sostener el ritmo del equipo local.
Además, Federico Viñas se robó los reflectores tras continuar en el campo pese a sufrir una herida abierta provocada por una fuerte patada de Mendy. El uruguayo mostró carácter y resistencia en un duelo que exigió al máximo a los jugadores de ambas escuadras.
Expulsiones, penaltis y postes: un empate con drama incluido
La intensidad del encuentro llevó a que Real Oviedo y Rayo Vallecano terminaran con un jugador menos tras las expulsiones de Chaira y Pathé Ciss. Sin embargo, fue el conjunto local quien más resintió la inferioridad numérica, especialmente en el tramo final del partido.
Uno de los momentos más determinantes llegó cuando Isi tuvo en sus pies la oportunidad de abrir el marcador desde el punto penal. Sin embargo, el guardameta Escandell se lució al detener el disparo, una acción que estuvo cerca de repetirse, lo que añadió aún más dramatismo al compromiso.
Antes del descanso, Santi Cazorla rozó el gol con un tiro libre que terminó estrellándose en el poste, mientras que en la segunda mitad Unai López respondió con un disparo que también impactó en la madera. Dos jugadas que pudieron cambiar por completo la historia del partido.
Al final, el 0-0 dejó un sabor agridulce para ambos equipos, que tuvieron ocasiones claras, momentos de superioridad y acciones individuales destacadas, pero que no lograron capitalizar en el marcador para llevarse los tres puntos.