Los Baltimore Ravens lograron una importante victoria como visitantes al vencer 27-19 a los Minnesota Vikings, en un encuentro donde la defensa y las pérdidas de balón fueron determinantes para el resultado final.
El partido comenzó favorable para los locales. En su primera serie ofensiva, el novato mariscal J.J. McCarthy lideró una marcha de 86 yardas que culminó con una anotación terrestre de Aaron Jones desde la línea de las 4 yardas, colocando a los Vikings al frente 7-0. Baltimore respondió con un gol de campo de T. Loop para acercarse 7-3, pero el primer cuarto terminó con ventaja para Minnesota.
En el segundo cuarto, los Vikings ampliaron su ventaja con un gol de campo de Will Reichard (10-3), aunque los Ravens comenzaron a equilibrar el juego gracias a su defensiva, que interceptó a McCarthy en una jugada clave en territorio profundo. Esa recuperación permitió que los visitantes sumaran otro gol de campo y redujeran la diferencia a 10-6. Antes del descanso, Lamar Jackson condujo una ofensiva rápida en los últimos segundos para dejar el marcador 10-9 con un gol de campo de 30 yardas de Loop.
El tercer cuarto marcó el cambio de ritmo del partido. McCarthy volvió a ser interceptado, esta vez por Marlon Humphrey, y los Ravens aprovecharon el error para ponerse al frente con un gol de campo de 22 yardas (12-10). En la siguiente serie, un balón suelto en equipos especiales recuperado por K. Jackson permitió a Baltimore capitalizar de inmediato con una anotación terrestre de Justice Hill, aumentando la ventaja a 19-10.
Minnesota intentó reaccionar con un gol de campo (19-13), pero Lamar Jackson tomó el control en el último cuarto. El quarterback de los Ravens encabezó una larga serie de 11 jugadas y 67 yardas que culminó con un pase de touchdown a Mark Andrews de dos yardas, seguido por una conversión de dos puntos con Rashod Bateman, para poner el marcador 27-13.
Aunque los Vikings recortaron la diferencia con un pase de touchdown de McCarthy a Jalen Nailor (27-19), la defensiva de Baltimore contuvo los últimos intentos de remontada y aseguró la victoria.
Con este resultado, los Ravens mejoran su marca a 4-5, manteniéndose en la pelea dentro de la AFC, mientras que los Vikings caen a 3-6, sumando una derrota dolorosa en casa pese a los destellos de su joven mariscal de campo.