La Fórmula 1 tiene nueva casa en México, pero su debut en televisión abierta ha generado una ola de críticas. Luego de que Fox Sports México perdiera los derechos a mitad de temporada, Televisa se convirtió en la nueva dueña de los derechos de transmisión, eligiendo el Gran Premio de la Ciudad de México como su primera gran prueba. Sin embargo, la retransmisión por Canal 5 fue catalogada como un "fracaso" por miles de aficionados que volcaron su frustración en redes sociales.
	 
	Plataformas como X, Instagram y TikTok se inundaron de quejas de usuarios que vieron la carrera por televisión abierta. La causa principal de la molestia fue casi unánime: la excesiva cantidad de anuncios comerciales que interrumpieron la transmisión a través de Canal 5.
	 
	"Parecía un maratón de comerciales con pequeños fragmentos de carrera", comentó un usuario en X, reflejando el sentir generalizado de la audiencia que siguió el evento de forma gratuita.
	 
	El contraste con la televisión de paga
	Cabe señalar que la carrera también se transmitió en México por el canal Sky Sports, disponible en sistemas de televisión de paga. Esta señal, a diferencia de la versión en televisión abierta, no contó con la constante interrupción de los anuncios, lo que subraya la diferencia en la experiencia de visualización entre ambas opciones.
	 
	Aunque la adquisición de los derechos por parte de Televisa significó el regreso de la F1 a la televisión abierta para una parte de la población, el primer Gran Premio dejó un sabor amargo para la base de aficionados.
	 
	F1 No será completamente gratis
	Un punto importante a considerar es que esta transmisión gratuita no será la norma para el resto de la temporada. Aunque el Gran Premio de la Ciudad de México se vio completamente gratis, solo tres Grandes Premios por temporada serán transmitidos por televisión abierta en su totalidad, limitando el acceso gratuito y completo a la mayoría del calendario de la Fórmula 1.
	 
	Mientras Televisa se prepara para los próximos desafíos de su nueva adquisición, la televisora enfrenta la tarea de conciliar la necesidad de ingresos publicitarios con la demanda de una transmisión de calidad ininterrumpida por parte de los apasionados seguidores de la Fórmula 1 en México.