El exjugador de Chivas y capitán del Macarthur FC, Ulises Dávila, se declaró culpable de liderar un esquema de apuestas ilegales en la liga australiana. El plan consistía en provocar amonestaciones intencionales durante partidos específicos para obtener ganancias en las casas de apuestas.
Dávila, quien brilló con México en el Mundial Sub-20 de 2011 y llegó a ser fichado por el Chelsea, vivía un gran momento en Australia, incluso fue elegido mejor jugador de la A-League en 2021. Pero todo cambió tras el partido del 9 de diciembre de 2023 ante Sydney FC, cuando varios jugadores del Macarthur recibieron tarjetas amarillas planeadas.
Según la investigación, Dávila habría ganado 200 mil dólares solo por ese encuentro. Otros futbolistas implicados lo señalaron como “el capitán del esquema”. La liga australiana respondió con mano dura: rescindió contratos y los suspendió de por vida.
El mediocampista tapatío vive ahora su etapa más difícil: libertad bajo fianza, presentaciones semanales ante la policía y una sentencia programada para el 19 de diciembre. Todo tras un duro golpe personal en 2022, con la muerte de su esposa, Lily Pacheco.