El Real Madrid inició la Liga de Campeones con una remontada épica en el Santiago Bernabéu (2-1) frente al Olympique de Marsella. En un partido lleno de tensión, polémicas arbitrales y momentos clave, Kylian Mbappé se vistió de héroe con un doblete desde los once metros que permitió a los blancos darle la vuelta al marcador tras comenzar en desventaja.
El duelo no pudo arrancar peor para los de Xabi Alonso. A los tres minutos, Trent Alexander-Arnold, recién fichado y pieza clave en el lateral derecho, cayó lesionado y tuvo que abandonar el terreno de juego, dejando en vilo al cuerpo técnico. Ese contratiempo desordenó al equipo y el Marsella aprovechó para golpear primero. En el minuto 22, Timothy Weah sorprendió a Courtois con un disparo potente al primer poste tras ganar la espalda a la defensa, poniendo el 0-1 y silenciando por momentos al Bernabéu.
El Madrid no tardó en reaccionar. Apenas siete minutos después, Rodrygo Goes encaró dentro del área y fue derribado claramente por un defensor. El árbitro señaló penalti y Mbappé asumió la responsabilidad. Con total sangre fría, engañó a Gerónimo Rulli y firmó el empate (1-1) en el minuto 29. El gol devolvió la confianza al conjunto blanco, que empezó a generar más peligro, aunque sin lograr concretar antes del descanso.
En la segunda parte, el Marsella mantuvo su orden defensivo mientras el Madrid buscaba con insistencia la remontada. La entrada de Vinícius Jr. dio mayor verticalidad al ataque merengue, pero el panorama se complicó aún más en el minuto 72: Dani Carvajal perdió los nervios y, tras un enfrentamiento con Rulli, acabó propinándole un cabezazo. El árbitro le mostró la roja directa, dejando al Real Madrid con diez jugadores y encendiendo aún más la tensión en el Bernabéu.
Pese a la inferioridad numérica, el conjunto de Xabi Alonso no se rindió. En el minuto 80 llegó la jugada decisiva: Vinícius desbordó por la izquierda y en el área un defensor del Marsella trató de cortar en una barrida, pero la pelota le impactó en la mano. El árbitro no dudó y señaló el segundo penalti de la noche. Mbappé volvió a colocarse frente al balón y, con la misma calma que en el primero, batió a Rulli en el minuto 81 para sellar el 2-1 y desatar la locura en Chamartín.
El tramo final fue de sufrimiento. El Marsella apretó en busca del empate y Aubameyang estuvo cerca de lograrlo con un potente disparo desde fuera del área, pero Courtois respondió con una parada decisiva para mantener la ventaja.
El pitido final confirmó el triunfo merengue, que arranca la Champions con tres. Mbappé se mantiene como el referente absoluto, demostrando que ha llegado para marcar diferencias en las grandes noches europeas. Sin embargo, la lesión tempranera de Alexander-Arnold y la sanción de Carvajal dejan a Xabi Alonso con deberes para el próximo compromiso continental.
