Costa Rica volvió a sufrir en la Copa Oro 2025, ahora ante República Dominicana, y quizás casi a la par con lo que aconteció en su debut ante Surinam en actividad del Grupo A, pero los centroamericanos cumplieron el trabajo a pesar de la dosis de sufrimiento.
La escuadra dirigida por Miguel Herrera derrotó por 2-1, sobre el final y de forma más que apurada a unos isleños que, al igual que lo que sucedió con México, dieron la cara y mostraron muchos más argumentos de los que se les esperaba.
Joao Urbáez abrió el marcador para República Dominicana a los 16' para sorprender a los dirigidos por Miguel Herrera, quienes no solamente se enfrentaban a un equipo ue tenía orden a la hora de defenderse, también a un cuadro que sabía atacar o, al menos, tenía idea de qué hacer con la pelota en los pies.
La tendencia de ver a un Costa Rica desesperado se vio hasta que una desatención, cerca del final del primer tiempo, orilló a que un penal abriera la puerta para que Manfred Ugalde igualara con un bestial cobro antes del descanso.
Joshimar Alcócer con un destello de virtud, puso la voltereta final y el último clavo a una República Dominicana que parecía merecer más, pero que no acabó por encontrar su camino a la portería.