Ángel Correa, actual jugador del Atlético de Madrid y posible refuerzo de Tigres, abrió su corazón en una emotiva entrevista donde habló de los duros momentos que vivió durante su infancia en Rosario, Argentina.
El atacante colchonero recordó cómo su familia, compuesta por diez hermanos, apenas tenía para comer tras la muerte de su padre. En ese momento, él apenas tenía diez años.
“Me llena de orgullo haber salido de mi barrio y llegar a donde he llegado, y sacar de la pobreza a mi familia. Nosotros no teníamos para comer, éramos 10 hermanos. Cuando mi papá falleció, yo tenía solo 10 años, se quedó mi mamá sola. Comíamos una vez al día”, contó en entrevista para
A los 12 años, Correa tomó una decisión que marcaría su destino: se fue solo a Buenos Aires para perseguir su sueño de ser futbolista. Con lo poco que ganaba, ayudaba a su madre enviándole dinero.
Pese a estas adversas condiciones, el futbolista argentino recuerda con alegría los momentos que tuvo que superar junto a su familia.
“(Teníamos que elegir a qué hora comer). Siempre al mediodía, en la noche ya nada. Íbamos a pedir, a abrir puertas de los taxis al centro, a vender rosas. Con mi abuela también. Andábamos kilómetros y kilómetros para pedir casa por casa”.