La eliminación del Inter de Miami de la Copa de Campeones de la Concacaf a manos del Vancouver, tuvo como protagonista un viejo conocido del Guadalajara, luego de que el delantero mexicano, Daniel Ríos pasó de ser relegado con Chivas para ahora ser pieza fundamental del conjunto canadiense y a jugar la final del certamen más importante de la zona.
El surgido en la cantera de Chivas no pudo tener un lugar en el primer equipo de Chivas fue vendido a los Estados Unidos con el conjunto del North Carolina FC en la USL Championship y posteriormente llegó a las filas del Nashville SC en 2018, donde vivió su mejor momento en la categoría inferior, al convertir un total de 21 goles en 34 partidos.
El buen momento que atravesaba en los Estados Unidos bastó para despertar el interés del Guadalajara de tenerlo en sus filas de regreso. Sin embargo, antes de regresar a México, tuvo una breve etapa con el cuadro del Charlotte FC donde marcó un total de nueve goles en 30 partidos.
Después de convertirse como uno de los mejores mexicanos en los Estados Unidos, fue fichado por Chivas en para el Torneo Clausura 2023. En su regreso al Guadalajara participó en 12 partidos y marcó un solo gol, motivo por el que en el Apertura su actividad fue a cuenta gotas, tras ver actividad en cinco juegos y disputar únicamente 68 minutos, cerrando el año sin anotaciones.
Nuevamente no tener un lugar en el Rebaño Sagrado fue cedido al conjunto del Atlanta United, equipo con el que marcó diez goles en 37 partidos, registrando su mejo etapa en la MLS, superando los números en su paso con el Charlotte en 2022.
Al finalizar su préstamo con el Atlanta United, reportó con Chivas, pero nuevamente no entró en planes, por lo que fue cedido nuevamente a la MLS, pero esta ocasión al Vancouver Whitecaps FC, de Canadá, equipo con el que registra una anotación y dos asistencias en apenas 15 juegos disputados.
Actualmente el atacante mexicano, tendrá la oportunidad de disputar la gran final de la Copa de Campeones de la Concacaf, ante Cruz Azul o Tigres, duelo que podría considerarse la graduación del atacante, luego de que conseguiría el título más importante de su carrera.