La Liga Rusa de Fútbol (RPL) asumió hoy el control del club Khimki para evitar una huelga de sus futbolistas en la próxima jornada tras el despido del técnico español Franc Artiga.
"La situación con el Khimki es muy triste y muy desagradable para todos nosotros (...) Se puede decir que hemos asumido la administración externa del club", anunció Alexandr Aláev, presidente de la RPL.
Añadió que hasta el lunes la liga no tendrá acceso a los documentos contables del club, pero que los futbolistas recibirán en breve parte del dinero adeudado, por lo que -aseguró- saltarán al campo el domingo ante el Zenit.
"Hemos acordado el pago de parte del dinero que le corresponde al club (...) Parte del dinero ya ha sido pagado, pero eso no significa que el problema esté solventado. Es sólo el primer paso", explicó, según el diario Sport-Express.
Aláev subrayó que su prioridad es garantizar la justicia de la competición deportiva, ya que el Zenit no puede enfrentarse el domingo a un equipo de suplentes.
"He recibido la confirmación de que el Khimki viajará a San Petersburgo con su primera plantilla", destacó.
En cuanto a Artiga, expresó su confianza en que dicho asunto se solucione "en breve", ya que -adujo- el español "cumplió honestamente con su trabajo".
"La cuestión del anterior técnico hay que cerrarla, pero no porque sea un extranjero, sino porque somos una comunidad futbolística y en primer lugar debemos pensar en los representantes de esta comunidad", señaló.
Los futbolistas del Khimki, equipo de la división de honor de la liga rusa, se declararon esta semana en rebeldía, según informaron a EFE fuentes del club.
Por ese motivo, los jugadores no entrenaron ni martes ni miércoles y el jueves se ejercitaron por su cuenta sin la presencia de ningún entrenador en el campo de juego.
Además, los futbolistas del Khimki, equipo que ocupa actualmente el puesto décimo segundo del campeonato ruso, no cobran desde diciembre pasado.
Artiga, que fue destituido aunque el equipo se encuentra fuera de los puestos de descenso, también se niega a firmar su desvinculación con el club hasta cobrar todo el dinero que se le adeuda, precisó la fuente.
El técnico catalán, que había asumido las riendas del equipo en junio de 2024, pagó los platos rotos de las abultadas derrotas recibidas por el club de la región de Moscú en las últimas dos jornadas de liga.
Artiga, quien ha manifestado su deseo de continuar entrenando en Rusia, trabajó durante más de una década en la cantera del Barcelona.
Durante esos años entrenó a talentos como Ansu Fati, Dani Olmo o Xavi Simons, que son internacionales con España -los dos primeros- y Holanda, respectivamente.
Tras abandonar La Masía en 2021, Artiga, que tiene ahora 48 años, trabajó dos temporadas en los Emiratos Árabes Unidos.