Marco Fabián, exjugador de Chivas y medallista olímpico, atraviesa una nueva etapa en su carrera, ahora como presidente del Ranger’s FC de Andorra, y aunque su presente está lejos del futbol mexicano, su corazón sigue vinculado al Rebaño. Desde Europa, expresó su deseo de volver algún día a Guadalajara, pero no como futbolista, sino como directivo.
“Siempre lo he dicho: llegará mi momento. Me encantaría regresar a Chivas a aportar lo que más pueda para ayudar al club”, aseguró en entrevista con ESPN.
En formación constante
Desde su llegada al club andorrano, Marco Fabián ha comenzado a prepararse en el ámbito de la gestión deportiva, aprendiendo los retos que implica liderar una institución futbolística. Esta experiencia, afirma, podría ser de gran valor para contribuir en el futuro del equipo donde vivió algunos de sus mejores momentos como jugador.
“Todos los días uno sigue aprendiendo, se sigue preparando. No quiero apresurar las cosas, pero me preparo para cuando llegue una oportunidad como esa”, agregó.
Fabián no puso plazos concretos para su retorno, pero dejó abierta la posibilidad de que ese momento pueda darse “en un año, dos, tres, cuatro... o quizá nunca”, aunque su deseo es claro.
Buena relación con Amaury Vergara
Un punto clave para que ese regreso se concrete en el futuro es su vínculo con la actual dirigencia del club. Fabián aseguró tener una relación cercana y cordial con Amaury Vergara, presidente de Chivas, lo cual facilitaría una posible colaboración.
“Tengo muy buena relación con Amaury y con toda la gente que está en Chivas. No tengo problema si me buscan o si tomo la iniciativa. Además, tengo una relación de amistad muy bonita con Amaury y su familia”.
Un regreso sentimental
Consciente de lo que representa Chivas en su carrera y en su vida personal, Marco Fabián no oculta su deseo de devolver al club algo de lo que le dio como jugador, ahora desde una perspectiva ejecutiva.
Por ahora, continúa su preparación en Andorra, pero no pierde de vista el deseo de volver a donde, según sus propias palabras, fue feliz.
