Al hablar de la NBA, la rivalidad más grande es la de los Boston Celtics y Los Angeles Lakers. Ambas son las franquicias más ganadoras en la historia de la liga, con 18 para los de la Conferencia Este y 17 para los de la Oeste. Este fin de semana se enfrentaron en el TD Garden para reavivar la rivalidad y dieron un auténtico espectáculo, que acabó con los Celtics victoriosos, por 111 a 101, y con LeBron James lesionado.
El partido del sábado entre Celtics y Lakers fue tan bueno que, según la NBA, fue el juego más visto en los últimos siete años, sin contar los partidos de Navidad. La liga reveló que la transmisión de NBA Saturday Primetime en ABC promedió 4.61 millones de televidentes; con un pico de audiencia de 5.3 millones.
Es importante enfatizar que es el partido más visto fuera de la ventana de los disputados el 25 de diciembre porque uno de estos partidos tuvo la mayor audiencia de la temporada 2024-25. El Lakers contra Warriors, donde Austin Reaves salvó a los californianos, alcanzó 7.9 millones de televidentes.
El declive de los Lakers tras perder contra Celtics
La dupla conformada por LeBron James y Luka Doncic había conseguido ocho triunfos seguidos antes de enfrentar a los Celtics en el TD Garden. Sin embargo, el equipo perdió ante los bostonianos y ante los Brooklyn Nets dos noches después.
El equipo angelino tratará de revertir la mala racha cuando enfrenten este jueves a los Milwaukee Bucks en el Fiserv Forum. Lo más complicado es que el equipo estará corto de forwards porque no contará con James, ni con Rui Hachimura y Maxi Kleber, quienes están fuera por lesión.
Actualmente, el equipo dirigido por J.J. Redick es el tercero mejor del Oeste de la NBA, con marca de 40-23. Sin embargo, están a cuatro juegos de dejar los puestos de playoffs y estar en el play-in.