El Ajax prolongó la fiesta del fútbol neerlandés y certificó, con muchos más apuros de los previstos, después de la prórroga, su clasificación para los octavos de final de la Liga Europa de fútbol, tras hacer valer el 0-2 que logró en la ida, pese a perder este jueves por 1-2 ante el St. Gilloise belga.

La clasificación que durante muchos minutos pareció escapársele de las manos al conjunto neerlandés, que se aseguró su continuidad en la segunda competición continental gracias a un gol de penalti de Kenneth Taylor a los tres minutos del comienzo de la prórroga. Todo un varapalo para el St. Gilloise que pareció en disposición de dar la vuelta a una eliminatoria en la que parecía condenado a la eliminación tras verse claramente superado por el equipo 'ajacied' en el choque de ida (0-2) disputado la pasada semana en Bruselas.

Pero si en el estadio Rey Balduino el equipo neerlandés, liderado por el jovencísimo Jorthy Mokio, de tan sólo 16 años, no dio opción al St. Gilloise, este jueves en el Johan Cruyff Arena el cuadro belga se tomó claramente la revancha.

Especialmente en una primera media hora de juego en la que los visitantes no sólo lograron igualar la eliminatoria con los goles del argentino Kevin Mac Alllister, que abrió de cabeza el marcador para los visitantes, y del canadiense Promise David, que firmó el 0-2 de penalti, sino que vieron como le anulaban un tercer tanto por un fuera de juego milimétrico.

Una circunstancia que no impidió al St. Gilloise seguir buscando una y otra vez la portería de cada vez más desdibujado Ajax, que jugó desde los veinticinco minutos con un hombre menos por la expulsión de Davy Klaassen, que vio la tarjeta roja directa al provocar el penalti que propicio el segundo tanto visitante tras despejar el balón con las manos sobre la misma raya de gol.

Efervescencia visitante que se fue diluyendo en la segunda mitad en la que el Ajax no sólo limitó las ocasiones de gol del equipo belga, sino que comenzó a generar peligro gracias a la velocidad y verticalidad de Bertrand Traoré.

De hecho, el atacante burkinés se convirtió en el héroe de la clasificación del conjunto neerlandés tras provocar al minuto del comienzo de la prórroga con un centro desde la derecha que del defensa inglés del St. Gilloise, Christian Burgess, cortó con la mano en el interior del área.

Una pena máxima que Kenneth Taylor no desaprovechó para poner de nuevo en ventaja al Ajax en la eliminatoria, tras firmar el que a la postre sería el definitivo 1-2, pese al asedio final del St. Gilloise rozó en varias ocasiones el gol del empate que hubiera forzado la tanda de penaltis

Agonía final que no impidió a los de Amsterdam lograr el billete para los octavos de final de la Liga Europa en los que los del italiano Fracesco Farioli se medirá con el Olympique de Lyon o el Eintracht de Fráncfort.