Carlos Alcaraz salió a tiempo del enredo que se encontró en el segundo set del choque de segunda ronda contra el italiano Luca Nardi (6-1, 4-6 y 6-3) y se situó, con más intriga de la esperada, en los cuartos de final del torneo de Doha, donde le espera el checo Jiri Lehecka que previamente superó al húngaro Fabian Marozsan por 6-4 y 6-2.
El murciano se dejó un set en el camino hacia el tercer tramo del torneo y tuvo que recuperar su mejor versión en la manga definitiva para superar el encuentro. Tardó una hora y 53 minutos en lograr su séptima victoria seguida en este 2025 tras las logradas en Róterdam, donde logró el título, y la duodécima en torneos de categoría 500. Al los obtenidos este año añade los cinco encuentros ganados en Pekín, en el 2024 que conquistó el pasado año.
De forma inesperada se encontró en un laberinto Carlos Alcaraz que transitaba con sosiego, a modo de trámite, en el choque ante el italiano, número 85 del mundo y sin título ni final alguna en su recorrido por el circuito. Pero tras un arranque plácido, contundente, se vio el español en un panorama ideal, una faena de aliño que después se le enredó.
Fue una de esas desconexiones más habituales de lo querido y de lo necesario que tiene el número tres del mundo que tenía el partid donde quería, con 6-1 y 4-1 y se le volvió de lado. El italiano, un desconocido para el español, reforzado por el triunfo logrado en el primer tramo ante el chino Zhizhen Zhang, dio la vuelta a la situación y en un abrir y cerrar de ojos obtuvo un impensable parcial de 5-0 que le dio el set y llevó el encuentro a un tercer parcial con ciertos tintes dramáticos y que dejó al español sin margen de error.
El transalpino, que tuvo que ganarse su lugar en el cuadro desde la fase previa, de 21 años, disparó su repercusión notablemente cuando en Indian Wells del pasado año derrotó al entonces número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic en tres mangas. Supuso esa victoria un impulso anímico en el italiano que no tuvo continuidad. Fue aquella la única victoria de Nardi ante un top 5 en lo que va de carrera. Con eso en la memoria creció en la pista de Doha el transalpino.
En Doha, tras ganar a Yasutaka Uchiyama y Mikhail Kukushkin en las rondas de clasificación y después a Zhang en primera ronda, pretendía alcanzar sus primeros cuartos de finan en un torneo de categoría 500. Pero se topó con Alcaraz al que metió el miedo en el cuerpo pero que escapó a tiempo de la emboscada a la que le sometió.
Desde que cayó en el Abierto de Australia con Novak Djokovic el murciano pretende acelerar en la carrera por el número uno. Ahora que Jannik Sinner está arrinconado, suspendido por dopaje, baja en los próximos eventos hasta Roma, aspira a recortar la distancia el español que transita por el curso con solo esa derrota.
Contra Nardi sumó su undécimo encuentro vencido en lo que va de 2025, séptima seguida. La lograda ante el italiano se sumó a la conseguida contra Marin Cilic en el primer tramo del torneo de Doha que por primera vez disputa Alcaraz.
El español, que en Róterdam ganó el primer torneo de su carrera en pista cubierta, aceleró a partir del tercer juego, cuando Nardi se apuntó el único de la primera manga. Después, ganó cinco del tirón para cerrar el set y tomar ventaja en el segundo que estuvo al final le dio la espalda.
Nardi dejó de lado el impacto por medirse al ganador de tres títulos del Grand Slam y el español levantó algo el pie del acelerador. Le atrapó una desconexión de las suyas, que le condiciona con frecuencia. Se puso con 4-1, Alcaraz pero el italiano se soltó, se animó, logró la primera rotura a su favor, volvió al partido y con 5-4, tras otro break, sacó para ganar el set. Y el partido empezó de nuevo.
Tuvo que recurrir a su mejor versión Alcaraz, tomar otra vez las riendas de un partido que se puso peligroso. Rompió y consolidó y se hizo con una renta de 4-1 que resultó decisiva. Alcaraz respiró.
El murciano selló su tercera presencia seguida en unos cuartos de final tras los del Abierto de Australia y Róterdam y jugará ante el checo Jiri Lehecka que previamente superó al húngaro Fabian Marozsan por 6-4 y 6-2.