El 25 de enero de 1995, el futbol mundial vivió uno de los momentos más polémicos de su historia cuando Eric Cantona, entonces delantero del Manchester United, protagonizó una escena que lo marcó para siempre.
Durante un partido de la Premier League contra el Crystal Palace en Selhurst Park, Cantona reaccionó ante los insultos de un aficionado local y decidió lanzar una patada voladora seguida de puñetazos.
La acción, conocida como el "Kung-Fu Kick", desató un escándalo mediático y deportivo sin precedentes. Cantona fue suspendido del futbol durante ocho meses, multado con 20 mil libras y obligado a cumplir 120 horas de servicio comunitario. Sin embargo, su frase durante una conferencia de prensa posterior quedó grabada en la memoria colectiva: "Cuando las gaviotas siguen al barco pesquero, es porque piensan que se arrojarán sardinas al mar".
Eric Cantona, leyenda del Manchester United
A pesar de las críticas, este episodio también consolidó la imagen de Cantona como un ícono rebelde del futbol. Su estilo de juego y su carismática personalidad lo convirtieron en una leyenda del Manchester United, equipo con el que ganó cuatro títulos de liga en cinco años.
Treinta años después, la patada de Cantona sigue siendo tema de conversación, recordada tanto por su impacto en la cultura futbolística como por la reflexión sobre la relación entre los jugadores y los aficionados.