Oliver Rowland, al volante de su Nissan, logró una emocionante victoria en el E-Prix de México de Fórmula E. El británico aprovechó la aparición de dos Safety Car y una estrategia acertada en el uso del modo ataque para superar a los Porsche de Antonio Félix da Costa y Pascal Wehrlein, quienes completaron el podio.
Domino inicial de Porsche
En la arrancada, los Porsche dominaron con Wehrlein manteniéndose en la primera posición, seguido de su compañero Da Costa. Sin embargo, Rowland mostró agresividad desde el inicio, superando al francés Jean-Eric Vergne para colocarse cuarto. Otros pilotos, como Jake Dennis, también avanzaron posiciones rápidamente, ubicándose en el top 5 durante los primeros giros.
Estrategias de modo ataque y cambios en la cima
La activación del modo ataque trajo cambios significativos en el liderato. Wehrlein lo usó temprano, cediendo momentáneamente la punta a Da Costa, quien luego cayó al quinto lugar tras una confusión estratégica. Mientras tanto, Dennis aprovechó su modo ataque para liderar la carrera, seguido de Vergne, Rowland y los Porsche.
En la vuelta 19, Da Costa recuperó terreno con un audaz adelantamiento que lo colocó nuevamente en la cima, dejando atrás a Rowland, Wehrlein y Dennis. Poco después, los Porsche retomaron el liderato con Da Costa y Wehrlein encabezando la tabla, mientras Dennis y Rowland se mantenían al acecho.
Interrupciones por Safety Car
La carrera tomó un giro inesperado en la vuelta 29, cuando un incidente entre el Kiro de David Beckmann y el Lola de Lucas di Grassi provocó la salida del primer Safety Car, eliminando las ventajas acumuladas por los líderes. Al reiniciarse la competencia, Rowland aprovechó su último minuto de modo ataque para adelantar a los Porsche y colocarse en la punta.
Sin embargo, otro accidente, esta vez del Jaguar de Mitch Evans contra el muro, trajo nuevamente al coche de seguridad. Esto dejó a los pilotos con solo tres vueltas restantes al reiniciarse la carrera.
Triunfo de Rowland
Con las posiciones apretadas, Rowland mantuvo el liderato hasta el final, llevándose una merecida victoria en una carrera llena de emociones y estrategias. Da Costa terminó en segundo lugar, seguido por Wehrlein en tercero, completando el podio.
El E-Prix de México dejó claro que las estrategias y la capacidad de aprovechar los momentos clave son esenciales en Fórmula E, y Rowland supo ejecutar ambas a la perfección para llevarse el triunfo.