El nombre de José Armando Guzmán Mendoza ha resonado fuertemente en el mundo del fútbol mexicano, especialmente en la hinchada de Cruz Azul, equipo al que el joven de 13 años le dedicó su pasión incondicional hasta el último de sus días. Su historia, marcada por valentía y amor por el fútbol, ha traspasado fronteras, llevándolo a ser nominado al prestigioso premio The Best de la FIFA en la categoría "Mejor aficionado del año". Esta nominación no solo destaca la fuerza de su lucha contra una enfermedad terminal, sino también el impacto que dejó en el fútbol, tanto en su equipo como en los aficionados de todo el mundo.
José Armando fue diagnosticado con leucemia a la temprana edad de cinco años. Desde entonces, su vida estuvo marcada por un constante desafío contra la enfermedad, pero nunca perdió la esperanza ni su amor por el fútbol. A pesar de la difícil batalla, su espíritu no se quebró. En octubre de 2023, ya con su salud deteriorada tras más de 120 quimioterapias, José Armando hizo dos últimos deseos: celebrar su cumpleaños rodeado de su familia y seres queridos, y asistir a un partido de Cruz Azul, su equipo de siempre.
La historia del niño no tardó en conmover a todos. Fue difundida por TV Azteca, y pronto el fútbol mexicano se unió a su causa. En un emotivo gesto de solidaridad, el futbolista de Cruz Azul, Uriel Antuna, dedicó un gol al pequeño aficionado mostrando una camiseta con su apodo, "José Armando", cuando anotó en el partido contra Chivas. A pesar de la adversidad, la pasión del niño por su equipo y por el fútbol no se apagó, y su nombre se convirtió en un símbolo de esperanza para muchos.
El 23 de abril de 2024, José Armando falleció a los 14 años, dejando un vacío en el corazón de su familia, amigos y de todos aquellos que se identificaron con su lucha. La FIFA, al anunciar su nominación para el Premio The Best en la categoría "Mejor Aficionado del Año", destacó su legado y la huella que dejó en el fútbol mexicano. En su sitio web, la organización señaló que “Su historia dejó una profunda huella en el club y en el fútbol mexicano”, un reconocimiento que no solo es un homenaje a su pasión, sino a la valentía de enfrentar una batalla tan difícil con una sonrisa.
“José Armando, un joven seguidor de Cruz Azul enfermo de leucemia, se convirtió en un símbolo de esperanza no solo para la afición del equipo, sino para todas las personas que enfrentan enfermedades terminales”, agregó la FIFA en su comunicado.
La nominación a este prestigioso galardón, cuyo proceso se decide por votación popular, es una oportunidad única para que los aficionados de todo el mundo rinda homenaje al pequeño guerrero. Cualquiera puede participar en la votación a través de la página oficial de la FIFA, registrándose y seleccionando al candidato de su preferencia. De esta forma, José Armando se ha ganado un lugar entre los tres finalistas, un reconocimiento a su legado que seguirá inspirando a generaciones de aficionados al fútbol.
Aunque su sueño de conocer a los jugadores de Cruz Azul nunca se cumplió, su historia perdura, demostrando que la pasión por el fútbol y el amor por un equipo pueden trascender más allá de la vida misma. La nominación a los Premios The Best de la FIFA es, sin duda, un tributo a un joven que nunca dejó de luchar por su equipo y que ahora, en su memoria, seguirá siendo un símbolo de fuerza y esperanza para todos.