Los malos resultados quedaron atrás. Uruguay cosechó cuatro valiosos puntos en la doble jornada de eliminatorias y dio un nuevo paso hacia el próximo Mundial 2026 de México, Estados Unidos y Canadá.
Eran siete los encuentros que la Celeste acumulaba sin ganar, sumando los del camino hacia la Copa del Mundo de 2026 y los de la Copa América disputada este año. Romper la mala racha era una necesidad.
Y el equipo de Marcelo Bielsa lo logró consiguiendo una heroica victoria, a la que este martes le sumo un empate de esos en los que el punto ganado es mucho más importante que los dos no conseguidos.
El primero de los dos partidos fue en el Centenario ante una Colombia que se fue al vestuario ganando por la mínima. Un comienzo del segundo tiempo a toda máquina le permitió a la Celeste remontar con un gol en contra y uno de Rodrigo Aguirre.
A sus 30 años, el atacante del mexicano América fue la gran apuesta del director técnico para la doble fecha y en su debut con la selección mayor se convirtió en uno de los más destacados.
El 2-1 en favor de Uruguay a los 90 minutos marcaba una victoria casi segura en favor del local, que pudo perder mucho de lo bueno que había hecho en el campo cuando Carlos Gómez igualó en el sexto minuto añadido por el árbitro.
Pero la Celeste se levantó y tiró de épica para ahuyentar los fantasmas. Un tanto de Manuel Ugarte en el minuto 100 selló el 3-2 final y los de Bielsa volvieron a sumar de a tres.
"Para nosotros era imprescindible volver a ganar y más allá de la forma en que se dio, que fue muy emocionante, era un triunfo muy necesario", apuntó en conferencia de prensa el director técnico nacido en la ciudad argentina de Rosario.
Asimismo, señaló que victorias como esa son sanadoras, porque acercan mucho a todas las partes que rodean "un sentimiento tan fuerte" como en el que en país sudamericano hay por la selección nacional.
El triunfo quedó atrás y Uruguay viajó a Brasil, un rival al que en estas eliminatorias había derrotado luego de más de 20 años sin poder hacerlo y al que no le ganó como visitante por dicha competencia.
Y aunque nuevamente no pudo lograrlo, consiguió un valioso empate 1-1 que le permitió quedarse con el segundo puesto de la clasificación y mantener dos puntos de renta sobre su rival de turno.
Tras más de un año sin marcar por eliminatorias, Fede Valverde anotó y esa fue una buena noticia para un equipo que mostró puntos muy altos.
La dupla de centrales conformada por José María Giménez y Mathías Olivera hizo un gran trabajo en ambos encuentros, lo mismo que los dos futbolistas que ocuparon el lateral derecho.
Nahitan Nández en el primero de los encuentros y Guillermo Varela en el segundo sellaron espectaculares actuaciones que les permitieron frenar a dos de los atacantes más importantes de la actualidad: Luis Fernando Díaz y Vinicius Junior.
Por otra parte, Rodrigo Bentancur retornó a la selección luego de una suspensión y fue una de las grandes figuras tanto en el Centenario de Montevideo como en el Fonte Nova de Salvador.
Los restantes jugadores también sumaron buenas actuaciones y Uruguay mostró en 180 minutos mucho de lo que había exhibido en los primeros juegos de las eliminatorias.
Cuatro puntos de seis en la doble jornada y 20 en la tabla de posiciones a falta de seis partidos por disputarse hacen que Uruguay este muy cerca de su quinto Mundial consecutivo. La Celeste ahuyentó los fantásmas y va por más.