Durante el partido del domingo ante los Chargers, el mariscal de campo de los Kansas City Chiefs, Patrick Mahomes, se vio envuelto en una jugada desafortunada que resultó en una posible lesión grave para el receptor Rashee Rice. Después de lanzar una intercepción, Mahomes y Rice intentaron hacer un tackle, lo que llevó a un choque que aparentemente lastimó severamente la rodilla de Rice.

Tras el incidente, Mahomes expresó su preocupación pero también su esperanza de que la lesión no sea tan grave como parecía. “Rashee realmente hizo una buena jugada. Estaba tratando de tacklear al rival y, evidentemente, me abalancé sobre él. Si no pierdo el balón, eso nunca sucede”, comentó el mariscal de campo.

Mahomes subrayó la fortaleza y el carácter de Rice, pero reconoció que verlo salir del campo en camilla era preocupante. “Es un tipo duro, y cada vez que se queda en el suelo y tiene que ser sacado en camilla, es una gran preocupación”, afirmó.

Aunque todavía se desconoce la gravedad de la lesión, Mahomes admitió que comprendió la seriedad de la situación desde el primer momento. “No sabía exactamente qué había pasado porque estaba intentando hacer el tackle. Sabía que no era bueno”, concluyó.