El Estadio Alfredo Harp Helú fue el escenario de una fiesta inolvidable este miércoles, cuando los Diablos Rojos del México celebraron con sus aficionados la conquista de su 17º título en la Liga Mexicana de Beisbol.
Tras una espera de una década, los escarlatas renacieron para proclamarse campeones nuevamente. Banderas ondeando, cánticos, matracas y trompetas llenaron el estadio, donde la euforia de los seguidores se hizo sentir mientras celebraban el regreso de su equipo a la cima.
Los jugadores arribaron en un turibús y fueron recibidos con ovaciones al dar la vuelta al campo. Entre los más aclamados estuvieron Juan Carlos Gamboa, Robinson Canó, Brooks Hall, Daniel Ponce de León, Alemao Hernández y Trevor Bauer, quien fue el más vitoreado por los asistentes.
El capitán Juan Carlos Gamboa agradeció a la afición y destacó el esfuerzo del equipo: “Este título es para la mejor afición del beisbol mexicano. Gracias al sacrificio de mis compañeros, logramos la misión 17”.
Lorenzo Bundy, mánager de los Diablos, también expresó su gratitud: “Este campeonato es de ustedes. ¡Arriba los Diablos Rojos del México!”.
La fiesta continuó con música de Mariachi Gama 1000, que interpretó canciones como "Cielito lindo" y "Sigo siendo el rey", mientras los jugadores convivían con la "pandilla escarlata". Un espectáculo de luces, fuegos artificiales, música de Max Peraza y la participación de las mascotas Rocco y Roccy completaron la noche de celebración para el equipo capitalino.