Bandas de delincuentes sudamericanos llevaron a cabo robos a turistas, durante los Juegos Olímpicos de París 2024, informaron las autoridades en un reporte confidencial.
Este documento, consagrado a sus actos, destacó, según una fuente próxima al caso, la importante proporción de detenciones de ciudadanos de Chile, Ecuador, Perú y Colombia, respecto al total durante la cita olímpica.
Estos expertos carteristas, organizados en bandas de tres a cinco individuos formadas por hombres y mujeres, de entre 30 y 50 años, tenían como principal objetivo los turistas extranjeros, en el transporte público y hoteles.
La nota, que detalla su modus operandi, describió a estas asociaciones como “muy móviles y ligadas a organizaciones criminales internacionales”, y especializadas en la “delincuencia de apropiación”, según esta fuente.
Las autoridades sospechan que algunos están vinculados a bandas de Chile, asociadas a la organización criminal Lanzas Internacionales.
Su radio de acción se extendió por Europa, Oriente Medio y Canadá, precisó la fuente, que los calificó de “turistas del crimen”.
Los miembros de esas organizaciones, que consideran el robo como una “auténtica profesión”, se transmiten entre ellos una “cultura del robo en el extranjero” y, a menudo, cuentan con permisos de residencia en España, país que utilizan como puerta de entrada y base de operaciones.
Debido a su carácter itinerante, las organizaciones policiales internacionales Europol e Interpol los vigilan de cerca; Francia anticipó también su presencia durante los Juegos Olímpicos, celebrados entre el 26 de julio y el 11 de agosto, en contacto con sus países de origen, según la fuente cercana al caso.
Durante la cita olímpica, una decena de robos pudo atribuirse, por ejemplo, a una de estas bandas, entre ellos el de una cámara valorada en 15 mil euros (16 mil 500 dólares), que servía para la difusión de las pruebas de clavados, en el Centro Acuático Olímpico de Saint Denis.
La investigación llevó a la detención de tres hombres y una mujer, de nacionalidad colombiana; además, dos de ellos residentes en Brasil, detención a principios de agosto en una vivienda del departamento de Sena Saint-Denis, alquilada a través de la plataforma Airbnb.
Los investigadores descubrieron computadoras portátiles, joyas, relojes de lujo, aparatos digitales; incluso, ropa con el lema París 2024, utilizada por los delincuentes, así como la acreditación robada a un atleta de Estados Unidos. La justicia los condenó a mediados de agosto a dos años de prisión firme y les prohibió viajar a Francia durante 10 años al término de su condena.
Otras bandas de sudamericanos contaban con falsas acreditaciones y pulseras para acceder a las sedes y a la Villa Olímpica, así como con documentación falsa (tarjetas de prensa, documentos de identidad); para los investigadores, algunos de estos pases estaban destinados a la reventa.
Algunas de estas organizaciones actuaban en el transporte público, en la entrada y alrededores de los hoteles, con los turistas extranjeros como objetivo; las autoridades detuvieron a ecuatorianos, chilenos, argentinos y cubanos en diferentes casos.
Algunos de los colombianos condenados en agosto también estuvieron presentes en la final de la UEFA Champions League de mayo de 2022, en el Estadio de Francia de Saint-Denis, recordada por la actuación policial y los robos a visitantes.
En julio de ese año, la justicia francesa condenó a tres peruanos a penas de seis a nueve meses de prisión, con suspensión de condena, por ocultar teléfonos robados a aficionados; tras la Final de la UEFA Champions League, las autoridades recibieron 80 denuncias.
