La cláusula de rescisión de contrato de Dani Olmo, situada en los 60 millones de euros, vence este sábado, por lo que si el Barcelona quiere incorporar al delantero español necesita apurar sus opciones.

Olmo, que jugó siete años en las categorías inferiores del Barcelona, siempre ha estado en el punto de mira de los azulgranas, pero este verano parece estar más cerca aún.

El motivo es la cláusula de rescisión que solicitó a su club de origen, el RB Leipzig, después de que Olmo comprobara cómo uno de los referentes de su equipo, Joško Gvardiol, abandonó el conjunto alemán el pasado verano con destino al Manchester City.

De hecho, el Barcelona ha vuelto a interesarse por él y, según algunas informaciones, el club y el representante del jugador ya se han reunido en diferentes ocasiones para intentar llegar a un acuerdo antes de este sábado.

Al Barça le interesa Olmo porque su entrenador, Hansi Flick, conoce su trayectoria, pero el problema es eminentemente económico. El Barça necesita liquidez -tiene diferentes operaciones financieras abiertas, una de ellas podría ser un préstamo bancario- y no tiene tiempo.

Además, el club catalán tiene otro frente abierto con Nico Williams, cuya cláusula es por una cantidad similar a la de Olmo. El club catalán no tiene tanta prisa en esta operación, ya que no tiene fecha de caducidad.

Según una información del canal de 'twitch' Jijantes, el director deportivo barcelonista, Anderson da Souza 'Deco', se habría reunido en Zaragoza con el representante de Nico Williams, Félix Tainta.

En cualquier caso, el Barcelona tiene un par de frentes abiertos, dos fichajes para reforzarse, mientras Hansi Flick continua con los entrenamientos de pretemporada a la espera del inicio de la gira en Estados Unidos a partir de la primera semana de agosto.